Después de ocho años volcada en la música, Lourdes Hernández, más conocida como Russian Red, aparca giras y grabaciones para buscar nuevas formas de expresión, entre ellas el cine, donde debutará con el corto El beso, una historia «romántica y atrevida». «Todo surge de escucharse a uno mismo. Cuando algo no funciona bien hay que cambiar de dirección y con la estructura de la música me pasó eso, y me empecé a abrir a otras cosas», explica la cantante y compositora, que en otoño pasado canceló por problemas de salud su gira americana de presentación de su tercer álbum, Agent Cooper. «Supongo que te haces mayor», añade. «Cuando llevas un tiempo trabajando en un sitio o con una forma de vida te apetece cambiar, es natural. Parece que cuando eres artista se espera que sigas haciendo lo mismo toda la vida y es raro si te pones a hacer zapatos como Daniel Day Lewis».