Las ventas de música vivieron en 2014 «un cambio extraordinario» de tendencia desde el inicio de los descensos con la llegada del nuevo siglo, con un incremento del 25,16%, según los datos del Anuario SGAE de las Artes Escénicas, Musicales y Audiovisuales presentado ayer. Con «precaución» pero con optimismo, como una «posibilidad de punto de inflexión» en las continuas pérdidas acumuladas desde hace 7 años, así se han recibido los datos de las industrias culturales de 2014.
De sus cifras se desprenden tendencias como el freno a la caída en determinados indicadores e importantes rupturas en otros en esa tendencia a la baja, como en las ventas de música grabada, que vivió «un cambio extraordinario» con un incremento del 25,1%, o en el número de espectadores en los cines y teatros, que el pasado año fue un 14,8% y un 6,5% superior respectivamente.
En el caso concreto de la música grabada, el sector pasó de ingresar 119.781 millones de euros en 2013 a 149.912 en 2014, según datos de Promusicae. Destaca especialmente el tirón del 30,7% del formato digital, que ya supera al físico, el cual obtuvo igualmente buenos datos, con una subida del 21,4%. A pesar de esta mejora, esta industria sigue sin recuperar los niveles de 2007. Desde aquel ejercicio, la música grabada se ha dejado el 51% de su valor de ventas.
El cine había perdido en 2013 un 17,8% de asistencia. En 2014 aumentó y, con en ello, también la recaudación, pero en un porcentaje menor al de espectadores, concretamente un 4,4% (frente a la pérdida de 18,5% del año anterior), porque el precio medio de las entradas se redujo con ofertas como la de la Fiesta del Cine. Los cines de la Comunitat Valenciana ganaron un 15,7% de espectadores, con 9.605.590 de entradas vendidas, lo que se tradujo en un aumento del 6% de la recaudación en las salas.
La peor nota la ponen sectores como la ópera, la danza o el de la música popular en vivo, en el que la actividad fue un 8,35% menor, dato «muy preocupante» para la SGAE, a pesar de ser menor al de 2013, cuando fue de un 11,37%.
