Los candiles o lámparas de aceite, llamados lucernas en época romana, tenían como función alumbrar. Pero además de esa utilidad doméstica, estos utensilios iluminaron también la historia a través de su decoración y su configuración, lo que los convirtió en objetos de arte. El MARQ ha querido dar a conocer estos pequeños objetos que fueron evolucionado a lo largo del tiempo y ayer inauguró una exposición en la sala de la biblioteca en la que se han reunido 43 piezas, bajo el título Luz de Roma, procedentes del museo alicantino, pero también del de La Alcudia de Elche y del Arqueológico Municipal de Elda.

Una lucerna realizada en bronce, una candil vidriado con dos cabezas de caballo y una lámpara de forma circular son las piezas más destacadas en esta muestra, que tendrá carácter itinerante y que se presenta con un original montaje en vitrinas. Además, se complementa con diversos paneles explicativos y dos audiovisuales.

El nuevo diputado de Cultura, César Augusto Asencio, afirmó que «los objetos pueden ser pequeños pero la historia se refleja en ellos», como demuestra esta exposición que se podrá ver hasta septiembre. «Pretendemos reforzar en verano exposiciones que completan la oferta para los visitantes, aseguró.

El diputado estuvo acompañado por la comisaria de la muestra, Anna Garcia, que resaltó el carácter didáctico; el director técnico del MARQ, Manuel Olcina, y el director regional de la Fundación Banco Sabadell, Juan Merino, entidad patrocinadora de esta iniciativa.