Ayer se abrió el plazo de presentación de ofertas para la adquisición de Ciudad de la Luz, que establece un precio mínimo de salida -tanto por el complejo completo como por la suma de los seis lotes en que se ha dividido- de 94.426.363,57 euros (IVA excluido). En una primera puja, ese será el montante mínimo para su venta. Sin embargo, el precio que podría llegar a pagarse es de 19 millones de euros. Y es que el pliego de condiciones contempla la posibilidad de una segunda subasta que ya no tendría que respetar ese mínimo, sino que valdría con que se pujase por el 20 por ciento de la valoración inicial.
El anuncio del pliego de condiciones para la venta de Ciudad de la Luz, aprobado el 5 de mayo, se publicó el martes en el Diario Oficial de la Unión Europea, de manera que será hasta el próximo 20 de julio cuando se puedan recibir propuestas para la adquisición del complejo, es decir dos meses desde su aparición en el DOUE.
El texto, como ya se adelantó, establece la posibilidad de venta tanto en su conjunto como en seis lotes que se adjudicarían por separado. El primero serían los platós 1 y 2, el edificio de producción AP1 y la zona sin construir 1, de 23.781 m2 y valorado en 16.848.739,25 euros; el segundo, los platós 3 y 4, más edificio de producción AP2, de16.670 m2, con un precio de 23.377.095,33 euros; el tercero, los platós 5 y 6, más el edificio de producción AP3 y zona sin construir 2, con 17.687 m2 y un valor de 16.517.848,74 euros.
Los otros tres lotes ya no incluyen platós: en el cuarto está el edificio de talleres y almacenes, con 27.924 m2, que sale a la venta por 19.489.425,38 euros; el quinto es el backlot 1, de 53,418 m2, con un valor de 5,728.192,51 euros, y el sexto, el backlot 2, el foso de rodaje y las instalaciones de bombeo de agua, con 95.007 m2 y un precio de 12.465.062,36 euros. Todos los lotes son propiedad de Ciudad de la Luz, a excepción del sexto, que pertenece a Sociedad Parques Temáticos de la Comunidad Valenciana (SPTCV). Quedarían fuera tanto el edificio de restauración como el de oficinas -cedido al Ayuntamiento de Alicante para palacio de congresos-, el Centro de Estudios, y el parking subterráneo y en superficie.
El procedimiento establece primar la oferta económica más alta, que en una primera subasta no puede ser inferior al valor de partida y será mejorable al alza. Sin embargo, si no concurriesen ofertas que cumplan estos requisitos se pasaría a una segunda ronda en el plazo de un mes, que ya admitiría ofertas por debajo del precio de partida, aunque no inferior al 20% de ese valor, ya que en ese caso se considerarían «antieconómicas». De ahí que se podría vender el total tan solo por 19 millones de euros.
Las pujas deben conllevar un aval de 5% de la cantidad por la que se licite, tanto del total como de cada lote, y se podrá efectuar el pago de forma aplazada que no podrá extenderse más de 6 años y no será superior al 60% del total.
En caso de que haya ofertas para el complejo al completo y para todos los lotes, se primará el total más ventajoso al sumar las cantidades de cada parte. Si no hubiera ofertas para todos los lotes, se elegirá la mejor propuesta económica y si quedan por licitar se abrirá una segunda subasta para las partes no adjudicadas.
En caso de tener que realizar esa nueva ronda, si al sumar las ofertas más altas de cada lote la cantidad superase a la de la propuesta por la totalidad, se daría 72 horas a quien puja por el conjunto para que superase la de las partes. Si accede, después los licitadores por lotes podrán también superar al total si lo desean, en el mismo plazo de tiempo. En caso de que lo superen se adjudicaría por partes.
Si no todos los lotes reciben ofertas, quedarán afectos a lo que resulte del proceso de liquidación de Ciudad de la Luz.
Si la adjudicación se realiza por lotes, los nuevos propietarios tendrán que constituirse como complejo inmobiliario en el plazo de tres meses desde la adjudicación, para asumir los gastos de los elementos comunes según la cuota de participación de cada adjudicatario. Este aspecto, sin embargo, según el pliego, queda «supeditado» a la tramitación y aprobación de una modificación del Plan Especial Director de Usos e Infraestructuras Ciudad de la Luz de Alicante (PEDUI) aprobado en 2001, ya que ese documento recoge que la parcela mínima es de 250.000 metros cuadrados, requisito que dejaría de cumplirse.
Uso poco definido
En cuanto a los usos que puedan hacer los adjudicatarios de las instalaciones, no concreta que deban ser audiovisuales, sino que la finalidad es «dar cumplimiento a la decisión de la Comisión Europea de 2012», para que devuelva los 265 millones que la Generalitat dio al complejo, y al «acuerdo adoptado por Ciudad de la Luz de cese de su actividad cinematográfica el 14 de febrero de 2013». Y establece que el o los adjudicatarios podrán darle «los usos que consideren oportunos en condiciones de mercado y de acuerdo con la legislación vigente».
Según el PEDUI, el complejo se encuentra en la zona NNL que tiene uso recreativo como dominante, «incluso el de producción de películas cinematográficas y servicios relacionados con la misma, de conformidad con lo establecido en el articulo 90 de las Normas». También establece un uso compatible de restauración, administrativo, comercial, aparcamiento y educativo-cultural.
