Los músicos de la Banda Municipal de Alicante hicieron sonar ayer sus instrumentos para tocar una marcha fúnebre en protesta por la situación de la agrupación provocada por la falta de personal y denunciar lo que consideran «compromisos incumplidos» por parte de las autoridades. Durante la concentración, se repartieron panfletos con el mensaje «Por Alicante, por la música, por dignidad, por una plantilla estable. Salvemos la Banda Sinfónica Municipal». En principio la agrupación tiene tres músicos de baja de larga duración, una plaza vacante por jubilación y dos con permiso de paternidad, lo que hace imposible interpretar algunas composiciones.