"Carlos Gardel está en la piel de la gente", sostiene el coleccionista alicantino José Manuel Ródenas. Este amante de la obra del cantante argentino de tangos está a punto de finalizar una personal recopilación de toda la discografía del célebre intérprete. Carlos Gardel fue cantante, compositor y actor de cine, además de uno de los más conocidos artistas que durante los primeros años del siglo XX dio a conocer el tango por todo el mundo.
Ródenas, que atesora más de un centenar de discos de este cantante y aglutina varias "joyas" de 78 rpm de otros coleccionistas, lo tuvo claro: "¿Qué puedo hacer yo por Gardel? Él me ha dado muchas alegrías escuchando su obra". De ahí surgió, explica él mismo en una entrevista con EFE, el reto de recopilar todas las grabaciones relacionadas con el insigne intérprete.
La colección alcanza ya 76 cd's, más de 6.000 horas de música, que agrupan desde tangos conocidos como "Caminito" o "Volver" hasta rarezas, reconstrucciones de las canciones de su filmografía e, incluso, homenajes y palabras dedicadas al cantante argentino.
Ródenas insiste en que "aquí lo importante no son la cantidad de discos, sino la calidad de este trabajo".
Este melómano no sólo ha recopilado canciones y versiones de Carlos Gardel: su gran labor ha consistido en limpiar el sonido de cientos de grabaciones.
Y es que escuchar el sonido sin imperfecciones de la voz del considerado para muchos 'rey del tango' supone todo un reto, pues sus discos han sufrido el deterioro del tiempo con cortes, ruidos de fondo y fragmentos que no suenan. Hasta ahora, la mayor recopilación del compositor es una obra, "Todo Gardel", con más de 970 títulos y 50 cd's. Ródenas, según afirma, ha ampliado este trabajo.
Entre los temas añadidos se encuentra un gran número de rarezas y versiones especiales, como una grabación hecha a dos voces del propio Carlos Gardel de uno de sus títulos más emblemáticos, "Al pie de la Santa Cruz", una versión considerada inédita.
Un trabajo "titánico" de recopilación y edición para este coleccionista alicantino, a quien le gustaría, confiesa, "realizar una publicación donde estuvieran realmente toda su obra".
José Manuel Ródenas hace referencia también a esas obras inéditas que permanecen en manos de coleccionistas privados, a los que insta con vehemencia a compartirlas para que los "gardelianos" puedan disfrutar su obra completa. Y coherente con su filosofía, anuncia que lo que tiene lo donará "gratuitamente en cuanto otros coleccionistas abran también la mano".
Hablar de Carlos Gardel es hacerlo de un mundo en blanco y negro, con un tango sonando de fondo en un gramófono, una escena que José Manuel Ródenas quiere devolver a las generaciones futuras, para que la voz de este cantante argentino no se pierda en algún desván olvidado.
