Van a tocar en un escenario al aire libre como los Jardines de Abril, ¿cómo será el concierto?
Tocaremos lo mejor de nuestro repertorio, lo que creemos que pueda gustar al público y a nosotros. Siempre intentamos elegir las canciones que mejor funcionan para cada caso, no es igual un teatro o sala pequeña que los Jardines de Abril. También hay que tener en cuenta las fechas, en verano es un poco distinto a un concierto en invierno.
¿Y qué expectativas debe tener el público que asista?
Va a escuchar buenas canciones, bien interpretadas, y a pasar un muy buen rato. Somos un grupo que se forjó y maduró concierto tras concierto, creemos que cada concierto es un poco distinto o «mejor», en este caso el lugar es especial y yo, además, he pasado de niño todos los veranos muy cerca de Sant Joan.
Llegan a un escenario en el que, días después, cantará Julio Iglesias. Habrá que dejar el listón alto...
Por supuesto, pero no por quien actúe después, sino porque es nuestra obligación.
¿Sonarán grandes clásicos como Déjame, Sobre un vidrio mojad', Ojos de gata...?
Intentamos contentar a todo el público y, sí, esas canciones y otras veinte más, sonarán en los Jardines de Abril.
Después de tanto tiempo, ¿uno se cansa de tocar temas de hace treinta años o los sigue interpretando con la misma intensidad?
Con el tiempo es cuando empiezas a disfrutar de verdad de las canciones y, si el público disfruta, nosotros también. El llevar años tocando hace que te olvides del esfuerzo y dediques el concierto a disfrutar.
¿Han notado una renovación en su público? ¿Tienen una nueva generación de seguidores?
Afortunadamente sí, la transmisión padre-hijo, novio-novia, tío-sobrinos, etc., existe, y en nuestro caso especialmente, ya que muchas de nuestras canciones forman parte de la vida de muchas personas.
Llevan tocando más de tres décadas y su agenda sigue estando bastante completa. ¿Cómo logran mantenerse en el panorama musical sin parecer repetitivos?
Hay muchas bandas que llevan tocando más tiempo que nosotros y fuera de España eso es un añadido de calidad. En nuestro caso tal vez sea la cantidad de canciones que gustan al público, que con el tiempo han ido creciendo. No olvidemos que la gente quiere oír canciones, no vernos a nosotros únicamente. También hemos tocado en diversos formatos: acústico, trío, con orquesta sinfónica, con otros artistas....
En septiembre compartirán escenario en la plaza madrileña de Las Ventas con Luz, ¿hay ganas?
Sí, y muchas. Hay afinidad de criterios musicales, mucha admiración mutua, y nunca antes habíamos compartido cartel. Habrá sorpresas y mucho cariño en ese concierto.
Este otoño tocarán por primera vez en Sudamérica, concretamente en Perú. ¿Por qué no habían ido hasta ahora? ¿Cómo ha surgido esta oportunidad?
Eso me gustaría saber a mí. Tal vez en su día no nos llevaron las discográficas, y allí tampoco ayudaron. Internet y las redes sociales acercan el planeta y nos hemos dado cuenta de que nos conocen bastante más de lo que pensábamos.
¿Tienen muchos seguidores en Latinoamérica?
No sé cuántos hay que tener para decir muchos, pero cada vez son más.
¿Salir de gira fuera de España es una buena opción para los músicos con la crisis que hay en nuestro país?
Para muchos artistas ha sido su única opción, aquí esta fatal todo lo relacionado con la cultura y el espectáculo. Ivas imposibles, pocos incentivos, salas cerradas, teatros carísimos, etc...
