El festival Rototom Sunsplash ha introducido mejoras progresivas de tecnología led en la iluminación de las áreas propias para que este año se pueda llegar a reducir un 84,6% el consumo energético diario, sin contar los escenarios.

El festival, que se celebra de 16 al 23 de agosto en Benicàssim (Castellón), aplicará este ahorro energético en zonas como el Foro Social, la Reggae University, African Village, Vivir la Energía, Magico Mundo, backstage, la carpa de prensa o los establecimientos del Rotobar.

Por lo que se refiere a los escenarios, la mejora en los sistemas de iluminación y la sustitución progresiva de los focos tradicionales por led ha hecho posible que en espacios como el Main Stage se ahorre 34,6%, mientras que en el escenario Showcase Club el gasto se ha reducido un 42,85%. No obstante, es en el escenario del Ska Club donde más energía se prevé ahorrar, con una merma del consumo del 57,14%.

A su vez, al igual que el año pasado, también se instalarán paneles fotovoltaicos en las tiendas de merchandising del Rototom Sunsplash, de modo que se autoabastecerán.

También se han tomado medidas para reducir de forma efectiva el consumo de agua, ya que el año pasado se instaló en la zona de acampada un sistema de reutilización de aguas grises que permitió aprovechar el agua de las duchas para las cisternas de los wc.

En cuanto a la recogida selectiva de basuras, la gestión de la retirada de residuos ha hecho posible separar en origen únicamente en las zonas de restauración 6.760 kilos de desperdicios. Además, el festival promueve la comercialización, adquisición y consumo de productos locales en todas sus áreas y sectores.

Por un lado, el área de cámping del Rototom Sunsplash ampliará este año sus servicios para poner al alcance de los usuarios una amplia gama de productos y artículos kilómetro cero.

El festival ha alcanzado acuerdos con entidades como la cooperativa de agricultura ecológica De Saó, cuya sede se ubica en el municipio castellonense de Les Alqueries, para comercializar frutas frescas y verduras ecológicas de temporada procedentes de explotaciones locales.

Con estos productos se persigue promover la dieta mediterránea y seguir la filosofía "del campo a la mesa", de modo que todo lo que se comercialice, tanto vegetales como vino, pan artesano, cosméticos o aceites de la tierra, entre otros, estarán a cargo de productores locales.

Por otra parte, el festival también apuesta por la adquisición de productos de proximidad en áreas como la logística.

A la hora de comprar materiales de construcción, iluminación, cableado o mobiliario, entre otros, se acude a proveedores locales, de modo que la inversión revierta en empresas de la propia provincia de Castellón. Por otra parte, el domingo 17 de agosto el festival celebrará la cuarta edición de la Green Car Parade.

La cita, en colaboración con el IES Serra d'Espadà de Onda y el Ayuntamiento de Benicàssim, consistirá en una exhibición de prototipos de vehículos desarrollados a partir de energías limpias como la solar, el bioetanol o el hidrógeno.

Durante el festival el recinto contará con diversos puestos que promueven una alimentación biológica y como novedad este año se podrá comer en el BIO restaurante itinerante Globefoodtrotter que se habilitará en el interior de un antiguo globo reciclado.

Además, en las barras gestionadas directamente por el Rototom se comercializarán vasos reutilizables y se extiende el uso de platos y cubiertos de biocompostaje, elaborados a partir de materiales biodegradables como la caña de azúcar, la fécula de maíz o la madera, a todos los servicios de catering del festival.