Se encontró con Los Miserables por casualidad, igual con el género musical. Fue a mediados de 2013. En agosto de ese año este argentino ya volaba de Buenos Aires a Madrid para ser Valjean.
¿Cuál es y cómo es su papel en Los Miserables?
Soy Valjean, un exconvicto que estuvo preso por robar una hogaza de pan para dar de comer a su familia. Lo condenan a cinco años y como lo ve injusto se escapa de la cárcel. Por el toque de una mano santa se redime y le entrega su alma a Dios, se convierte en un hombre de bien. Yo de chico tuve una conexión muy fuerte con la religión, entonces hay algo de todo eso que para mí es cercano. El papel es una responsabilidad porque Javert y Valjean son los responsables de contar ese paso del tiempo.
¿Qué diferencia este musical de otros?
Es el musical de musicales. Hace 30 años que está en cartel. La historia que lo sostiene y en la que está inspirada, la novela de Víctor Hugo, antes del musical era un clásico de la literatura. Nos habla no solo de una crisis social sino también de los dilemas humanos por los que pasamos todos en nuestra vida. El amor, los sueños rotos, el bien y el mal, es una historia muy rica y muy profunda, y a la vez está muy bien contada y se captó la esencia a la perfección en el musical.
¿Hasta qué punto es importante que la gente conozca la historia que va a ver?
Lógicamente si uno leyó la novela y va a ver el musical emociona ver ese mundo y tenerlo frente a los ojos, porque está tan bien capada la esencia de la novela que los personajes cobran vida. Nos gustaría saber qué piensa Víctor Hugo si viera el musical... Y el que no conozca el libro va a sorprenderse porque es impactante.
Hay quien dice que en realidad Los Miserables es una ópera.
Bueno, en general se habla de ópera o no según el estilo de composición y de la vocalidad. No soy quién para hacer esa clasificación, pero sí que cumple los requisitos de la ópera. Son diálogos cantados, pero la estética es una estética vocal no tan impostada porque las historias que se cuenta son muy crudas y eso se tiene que escuchar.
¿Para los actores los musicales se han convertido en una oportunidad?
Yo llegué a España en agosto 2013 para ensayar y estrenar. Y empecé en los musicales de casualidad. Estudiaba música y tocaba instrumentos, empecé a cantar y un día un amigo me llevó a una clase de teatro y me quedé fascinado. Vi la película de El fantasma de la ópera, me enamoré de esa obra y allí decidí empezar estudiar música y teatro porque estaba en la universidad estudiando bioquímica. Dos años más tarde hice ese musical en Buenos Aires y me eligieron junto con Nicolás Martinelli , con el que comparto el papel de Valjart en Los Miserables. Por ahora los musicales son mi vida, el teatro musical es mi trabajo.
¿Cree que en España será una moda o el musical ha llegado para quedarse como en otros países?
Justamente el otro día leía que España, Madrid específicamente, es la tercera ciudad en el mundo en producción de musicales tras Broadway y Londres. Por lo que veo es casi una institución, es un punto incluso turístico importante y los teatros están llenos, así que creo que hay musicales para rato. Además hay empresas productoras de musicales y eso en mi país por lo menos no existe. Ya hay una infraestructura, se ha generado un polo de consumo de musicales y eso es importantísimo.
¿Por qué tendría que ver el público alicantino este espectáculo?
Porque tiene todos los condimentos de una historia. Habla de cosas actuales y cotidianas, de la revolución y de la crisis del ser humano, temas tan cercanos que no hay forma de que en alguna célula del cuerpo no resuene algo.
