Todo nació con un comentario de su novio: "estás empanada" y, lo que a simple vista puede parecer una anécdota, a la joven ilustradora Ana Oncia le sirvió como acicate para escribir su primera novela gráfica, "Croqueta y Empanadilla", editada por La Cúpula.

"Fue todo un poco tonto. Mi novio y yo fuimos de viaje a Berlín y, como buenos estudiantes de Bellas Arte fuimos a ver muchos museos. En un momento en el que estaba cansada mirando un cuadro me dijo era una empanada y yo le dije, pues tú una croqueta", así ha contado a Efe la ilustradora alicantina el origen de su primer libro que "Romeo le hubiera regalado a Julieta".

Con estos dos personajes "comestibles", Oncina ha creado una serie de historias en viñetas en las que relata "todas sus experiencias" con su pareja, incluido el desorden en el piso que comparten.

Como ha confesado la alicantina, "Croqueta y Empanadilla" es casi un sueño ya que, animada por su novio, empezó a dibujar y guionizar las aventuras de sus "alter ego" en marzo de 2013 y en junio se "animó" a enviarlo a la editorial.

"Fue mi novio el que me lo dijo y lo envié. Al día siguiente me llamó la editorial y no me lo podía creer, estaba en un sueño y sigo en un sueño", ha expresado.

Calificado como un dibujo "inocente", Oncina (Elda, 1989), no solo está viviendo el sueño de publicar, sino también la "felicidad" de que la gente se sienta identificada con sus historias. "Que las parejas que lo lean se sientan identificadas con unos personajes tan infantiles, tan monigotes, me hace estar muy contenta", dice.