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Alumnos de Ciudad de la Luz piden que les devuelvan el dinero de la matrícula

Estudiantes no aceptan el plan propuesto para empezar el curso esta semana - Los afectados afirman que la dirección no les garantiza que puedan finalizar la formación comprometida

Alumnos afectados por las titulaciones del Centro de Estudios, en un rodaje del curso pasado. información

Los alumnos de las titulaciones de cine propias del Centro de Estudios Ciudad de la Luz -un total de catorce estudiantes de Dirección Cinematográfica, Edición y Montaje, Fotografía y Arte Dramático- han exigido a la escuela de cine del complejo la devolución de los importes abonados por reserva de plaza este año (550 euros por alumno) y el importe íntegro de las matriculaciones del curso anterior (5.750 euros por alumno).

Así lo solicitaron los alumnos en un escrito presentado ayer a José Antonio Escrivá, director del Centro de Estudios y del complejo cinematográfico, y el motivo no es otro que la falta de garantías por la dirección de la escuela para poder concluir este año la formación en estas titulaciones, que se dividen en dos cursos y por los que los alumnos recibían mil horas lectivas en cada uno de ellos a razón de 5.750 euros por curso.

Tras la eliminación en octubre del segundo curso de dirección de Fotografía y Arte Dramático -que dejó sin solución a tres alumnos- la docena de estudiantes del segundo curso de Dirección Cinematográfica y Edición y Montaje rechazaron ayer la propuesta final de estudios presentada para que los alumnos comenzaran las clases ayer, con ocho semanas de retraso sobre el calendario previsto.

El programa planteado «no satisface nuestras demandas, no por el programa de estudios en sí, sino porque pedíamos garantías de que se fuera a llevar a cabo y no son capaces de garantizarnos que vayamos a finalizar nuestra formación», expusieron ayer los representantes de los alumnos.

Los afectados señalaron que la institución «no se hace responsable del compromiso que adquirieron con ellos ni en las condiciones que les fueron ofertadas» las clases hace un año y añadieron que «el centro no ofrece ningún tipo de garantía de continuidad de su labor durante el curso lectivo».

«Somos nosotros los que tenemos que poner el dinero, así que no hemos aceptado empezar un curso que no sabemos con seguridad si finalizará», apunta Mario Núñez, uno de los representantes de los estudiantes afectados.

Además, añaden que el programa final no supone una solución para todo el alumnado afectado, ya que «excluye a los alumnos de Dirección de Fotografía, a los que se les ofrece cierta compensación a través de asistencia a clases o meritoriajes que no están absolutamente garantizados, y al alumno de Interpretación, para el cual no hay una solución efectiva».

El plante de los alumnos a Escrivá no es sino el fruto de una degeneración paulatina de los estudios propios ofertados en este centro de formación adscrito a la Universidad Miguel Hernández -que sigue impartiendo el Grado en Comunicación Audiovisual- ante la falta de recursos, que provocó la dimisión del anterior director Luis Cruz, en enero de este año.

La escuela de cine funciona a través de una fundación cuyos principales patronos eran la Generalitat, que destinaba 300.000 euros anuales, y la desaparecida CAM. Ante la extinción de la entidad financiera y la intención del Consell de incluir el centro de estudios en la venta del complejo, la escuela se financiaba en los últimos años exclusivamente con las matriculaciones de los alumnos.

A ellos se sumó el descabezamiento del cuerpo técnico, con el despido de nueve profesores y técnicos desde septiembre de 2012 y el despido de la subdirectora, Virginia García Rubio, el pasado mes de julio. Tampoco el fichaje del director de cine Pablo Berger como coordinador de la titulación de Dirección Cinematográfica ha durando más de un curso, tras suprimirse en septiembre los puestos de coordinadores, incluido el de Berger.

De hecho, a principios de octubre no se abrió la matrícula para nuevas incorporaciones de alumnos a estos títulos propios, tan solo quedaba que los que cursaron el primer curso el año anterior pudieran culminar su formación en 2014.

La singularidad con la que se crearon en el año 2006 estos estudios formativos, tanto la titulación de grado como los títulos propios, era su pertenencia al complejo cinematográfico de Ciudad de la Luz, su relación directa con la industria audiovisual y su vinculación a la realidad del sector. De hecho, en su inicio los alumnos han podido disfrutar de clases magistrales de grandes directores que pasaron por los estudios, como Coppola, Bigas Luna, Carlos Saura o José Luis Cuerda. Desde hace más de año y medio, sin embargo, no se ha desarrollado ningún rodaje en los estudios.

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