A día de hoy continúa preparando su séptimo álbum de estudio Lubna, una ópera rock que se publicará en 2014. ¿De dónde surge esta fusión?

Todo empezó con una historia literaria, una novela. He estado durante los últimos cinco años trabajando mano a mano con un escritor y con Pepe Herrero. Entre los tres hemos dado cuerpo a una obra inspirada en lo que desearíamos todos a nivel social, una justicia divina.

Defiende que un artista no necesita un mánager para que el público escuche sus canciones gracias a las redes sociales... ¿Es así?

¿Sabes lo que pasa? El mundo de la música está dando un vuelco tremendo. La red empuja con mucha fuerza y el gran error de las discográficas ha sido no haberse hecho amigo de muchos portales piratas que hoy difunden y cuelgan muchos discos. Yo misma descargo música de Internet.

Por tanto, ¿No se considera una artista que teme a la piratería?

No. Un artista es algo más. Ser artista no es solamente grabar un disco. Hoy por hoy, grabar un disco es una excusa para que artistas como nosotros vayan de gira. La oportunidad que te dan muchos portales es que la gente te escucha. Los que están siendo muy abandonados son los autores. El artista siempre ha podido sobrevivir pero el autor no. Entonces es aquí donde hay que buscar un equilibrio.

Hace un año empezó un proyecto en Internet, «Community Beat», una plataforma digital para la difusión de música en la red sin intermediarios. Un año después, ¿Ve cumplidos los objetivos de la plataforma?

Lo he abandonado bastante. Este año con la ópera he dejado muchas cosas ya que la edición de una ópera sinfónica consume mucho tiempo y este año espero que en el momento en que termine la grabación total pueda retomarlo. Es muy atractivo y divertido ya que haces vídeos con tu gente y no tienes a ninguna compañía que te diga nada, tú subes lo que sientes.

En estos últimos años ha participado como jurado en programas televisivos como Tu cara me suena o El número uno. ¿Qué ha aprendido en su paso por la televisión?

Tengo que decir que es una de las experiencias mas divertidas que he hecho en los último años. Me lo paso genial. Además, tenemos muy buenos compañeros en la tele, generosos y amables. En El número uno tienes una responsabilidad mayor ya que trabajas con nuevos artistas y hay que ser lo más justo y equilibrado en la toma de decisiones. Sin embargo, Tu cara me suena es para mí el niño mimado, y no quería, yo me resistí bastante a la televisión pero Óscar, mi mánager, me dijo que tenía muy buena pinta y que iba a ser divino, por lo que le agradezco que me convenciera.

¿Se considera una artista madura?

No, todo es seguir aprendiendo. Si tú quieres seguir en esta profesión tan bonita y constructiva como ésta, no te puedes dormir.

¿Cuál es su mayor inspiración a la hora de componer?

¿Mi mayor inspiración? Si te digo la verdad, no existe. Existe el trabajo, aunque tengo que decir que las mejores cosas que he compuesto han sido durmiendo y entonces me tengo que despertar e irme corriendo a grabarme.

¿Es una defensora del colectivo gay?

Yo me considero la más marica. Cuando me refiero a ser gay significa que soy gay de espíritu. Me he casado con un señor que se llama Óscar pero si este señor se hubiera llamado María, me hubiera casado con María porque por el camino nos casamos con personas y no con sexos. Estamos equivocados cuando etiquetamos todo, es un grave error porque así no evolucionamos. Yo siempre lo digo: te enamoras de la persona y no del sexo.