Los restos de ADN del poeta Pablo Neruda ya han sido enviados a Carolina del Norte y a la Universidad de Murcia para establecer la causa de su muerte durante la dictadura de Pinochet. El proceso sobre la muerte de Neruda comenzó en mayo de 2011, cuando el Partido Comunista interpuso una querella basándose en el testimonio del exchófer, que apuntó que el poeta pudo ser asesinado.