El Fanfiction es un fenómeno literario que consiste en rescatar y utilizar a personajes, ambientes o situaciones de cualquier novela, cómic, videojuego o serie conocida. Lo practican jóvenes, de 14 a 30 años, y sobre todo mujeres, que consumen y producen este tipo de relatos que se difunden especialmente por Internet. Es una nueva literatura, o al menos una literatura alternativa, fuera de los puntos comerciales convencionales, de las bibliotecas y las editoriales, que rastrean también otro tipo de lectores exigentes. Vinculada además a otras corrientes culturales como el «anime» (el universo del Manga japonés), el Fanfiction se identifica igualmente por la condición sexual o erótica de muchos de sus relatos.

Dicho esto, la mayoría de autores que se inician en el Fanfiction tienen un punto en común: su enfado o desacuerdo por la historia elaborada por su creador original. Y algo así fue lo que ocurrió con las alicantinas Yama Marina Santacruz y Alba García, estudiantes de Historia y final del Bachillerato respectivamente, quienes comparten relatos de Fanfiction desde hace ya varios años. «Los finales de las historias que veíamos no nos gustaban. Eran finales fatales y horrorosos que no compartíamos. Por eso nos animamos a escribir. Porque es la única forma de darle continuación a la historias, además de ser el recurso más barato y rápido», afirman.

Alba y Yama, con la mayoría de edad recién cumplida, pueden presumir de producción literaria, con más de 20 historias, y con más de 1.000 páginas en algunos de estos casos. En el Fanfiction, recuerdan el rescate de una serie «anime» que les marcó, La chica que saltaba a través del tiempo, recreando los acontecimientos que se producirían 10 años después del final planteado por el autor original. Para ello, estudian ademanes, gustos, gestos de los personajes... vamos, una investigación literaria en toda regla. «Se puede moldear la historia, eso está claro, y añadir alguna cosa nueva. Pero intentamos que la personalidad de los personajes sea la misma, estudiando las partes claves de la película y tomando notas», añaden.

Con todo, reconocen la importancia de la condición sexual y erótica de los relatos, casi imprescindible en cualquier Fanfiction: «Hay mucha gente que nos pide más escenas de sexo cuando escribimos. Es algo normal. El sexo y lo erótico son dos rasgos muy importantes en el Fanfiction. De hecho, mucha gente nos lee solo por esto», aseguran.

La alicantina Bea Sabater, estudiante de Ingeniería Multimedia, es otra autora de Fanfiction que en este caso se inclina por la versión «one shot», es decir, historias más bien cortas, de poco recorrido. Sus gustos están en los videojuegos, donde mezcla a personajes, ya sea del Final Fantasy u otras sagas más conocidas.

Es lo que se conoce como «crossover». «Puedes encontrar o no calidad en el Fanfiction, es como todo. Yo te aseguro que cuando leo un Fanfiction con faltas de ortografía dejo de leer», puntualiza.

Hay Fanfiction con secciones enteras dedicadas a Harry Potter, y existen hasta Fanfiction inspirados en grupos musicales y actores. Considerada o no como una pequeña vanguardia literaria, el Fanfiction demuestra un hecho evidente: el control de los personajes no está en los autores originales, sino en los fans.

TÍTULOS CLAVE

YURI

Es un vocablo japonés para referirse al amor entre mujeres, que identifica a un sector del Fanfiction y de otras corrientes culturales.

YAOI

Término popular japonés que denota la representación romántica, artística o erótica de relaciones de amor homosexual entre dos hombres, y representa a otro público lector del Fanfiction.

ECCHI

Pronunciación de la letra H japonesa, con relatos de contenido heterosexual.

LEMON Y HENTA

Lemon representa los escritos eróticos en el Fanfiction. Por su parte, Henta corresponde a los relatos pornográficos o de sexo explícito.