El humorista gráfico Antonio Fraguas Forges no pudo recoger ayer en la Universidad de Alicante el premio Notario del Humor por encontrarse hospitalizado de una dolencia, al parecer, leve, pero lo hará el próximo mes de octubre cuando la muestra Humor Social XIII, inaugurada ayer en la sala Aifos del campus, se traslade a la Sede Universitaria de Alicante.

Así lo indicó ayer el presidente de la asociación de humoristas gráficos (FECO España) y dibujante de INFORMACIÓN, Enrique Pérez, que transmitió de parte de Forges "que no nos olvidemos de Haití" -en alusión a la frase que acuña a diario en sus viñetas- en la apertura de la exposición, que cumple su decimotercera edición y que reúne 63 obras de 52 autores nacionales y algunos extranjeros.

La crisis, los banqueros, los mercados, la corrupción, los recortes, la merma de derechos y, cómo no, la indignación manifestada en protestas con final policial, quedan reflejadas en los trazos de dibujantes como Edu, Ortifus, Kap, Igepzio o Javi.

Con ironía, sarcasmo, escepticismo o desesperanza, el humor repasa las concentraciones del 15-M, pero también la crisis del euro, los ajustes sanitarios, el cambio de gobierno o la imputación de Iñaki Urdangarin.

Para el veterano dibujante Edu, que trabajó en La Codorniz, "muchas de las viñetas de hace treinta y cuarenta años servirían hoy porque todo se repite, solo que ahora nos asusta más, pero crisis era la de mi generación cuando éramos niños".

Ortifus, dibujante del grupo Editorial Prensa Ibérica, la indignación actual da para mucho porque "a los dibujantes nos estimulan las situaciones injustas y ahora hay ataques por todas partes, solo que antes la gente estaba ciega y ahora sale a protestar". Además, señala que cada humorista gráfico disecciona la actualidad a su manera, "desde el humor derrotista y desesperanzado de El Roto al humor muy divertido de Forges".

Nerja, autor de una viñeta en la que los manifestantes van oyendo un partido Barça-Madrid, divididos, considera que "la crisis tiene que servir para cambiar las cosas".

El director del secretariado de Cultura de la Universidad de Alicante, Carles Cortés, agradeció la colaboración de la Fundación Manuel Peláez para la realización de una muestra "que reflexiona con ironía y sarcasmo sobre la realidad en un momento difícil y de cambios, donde las entidades públicas deben ir de la mano de las privadas para que la cultura continúe".

La muestra permanecerá en la Universidad de Alicante hasta el 20 de julio.