Treinta y cinco años después, José de Eusebio, director de orquesta y ganador de un premio Grammy, aún conserva su primera batuta, aquella de madera firmada por Enrique García Asensio que ganó por formular una pregunta en el programa de TVE que presentaba, El mundo de la música. Vicente Jorge Adriá, profesor de flauta y director de banda durante años, utilizó la suya en conciertos y la conservó hasta hace unos días, que cayó en manos de su hijo. A José Solá, director de la Agrupación Musical La Lírica de Silla, le duró menos. Todos creen que algo debió de impresionarles García Asensio para haber continuado con sus carreras musicales tras su paso, con 9 ó 10 años de edad, por un programa de televisión en blanco y negro.

El alicantino José de Eusebio, de 45 años, que dirigió recientemente a la Filarmónica de Moscú en el Bolshói, no recuerda qué año era pero no se olvida de los botes que daba en la silla del plató para hacer su pregunta: cuál era el papel de un director en la orquesta. El premio por eso era una batuta y algunos incluso llegaban a dirigir la orquesta de RTVE. "A mí eso no me tocó pero yo me fui súper contento y presumí mucho de la batuta en el colegio". Entonces ya estudiaba solfeo y piano y veía el programa cada semana: "Era muy famoso, yo lo recuerdo como El hombre y la tierra o los payasos de la tele y creo que desde el punto de vista de la iniciación a la música era de lo mejor que ha habido en televisión, con música de verdad, y García Asensio explicaba las cosas de forma muy directa". Varias décadas después, él aún conserva la batuta: "La llevo en mi batutero y va a todos sitios conmigo, es una especie de amuleto". No tiene claro si este hecho le influyó en su decisión de ser director de orquesta, "pero sé que me gustó muchísimo como experiencia -afirma- y lo recuerdo siempre".

De Eusebio conoció después a García Asensio, al igual que José Solá, de Buñol, que estudió dirección con el maestro. Solá no recuerda la pregunta ni qué fue de la batuta, "pero cuando salimos de allí y llegamos al pueblo yo era como un héroe y al final acabé estudiando dirección de orquesta", reflexiona, tras añadir que "puede que me influyera porque el programa impresionaba mucho, veías cómo te hacían caso con una batuta. A lo mejor en el subconsciente se me quedó grabado".

Jorge Vicente Adrià, de 44 años,, participó en el programa especial que se hizo en el Teatro de la Unión Musical de Llíria y recuerda que fue premiado por responder a una pregunta sobre el compositor Khachaturian. "Me dio mucha alegría tener una batuta firmada por él, era un icono, y la llegué a utilizar en conciertos. Yo ya iba al conservatorio y tenía muy claro que quería ser director y creo que eso me reforzó en mi convicción". De hecho, este hijo de músico dirigió una banda en Tarragona durante años y es profesor superior de flauta travesera. Adrià se quedó entonces con las ganas de dirigir la orquesta de RTVE, "fue una lástima, pero luego lo he hecho con mis alumnos para que vean lo que es dirigir".

El maestro ha encontrado ya a una veintena de niñosEl director de orquesta Enrique García Asensio inició hace unos meses una campaña titulada La semilla de una batuta que tiene como fin comprobar si sus lecciones desde El mundo de la música habían tenido fruto tres décadas después y si algunos de esos cientos de niños que pasaron por el programa de televisión orientaron después sus carreras profesionales hacia la música.

El interés por saber si estimuló el oído de los escolares le llevó a iniciar una campaña en su web y, a través de ella, ya ha encontrado a una veintena de niños a los que premió con una de sus batutas firmadas, muchos de ellos en la Comunidad Valenciana, con los que prevé realizar un encuentro en breve.

El objetivo final de esta iniciativa es demostrar que la televisión puede ser un valioso instrumento didáctico, "que invertir en cultura en televisión no es perder el tiempo", como señaló García Asensio.