El relevo en la Diputación Provincial de Alicante con la salida de la presidencia de José Joaquín Ripoll acarrea modificaciones en la composición de algunas de sus instituciones, como el Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert, que se encuentra en fase de renovación de los miembros de su junta rectora.

A los vocales nombrados por el pleno de composición de la Diputación el pasado 1 de agosto -por el PP, Miguel Zaragoza, alcalde de Santa Pola, y Adrián Ballester, diputado de Redován; por el PSOE, la exalcaldesa de Guardamar, Marylene Albentosa-, se suman ahora los concejales de Cultura de los Ayuntamientos de Alicante y Elche, Miguel Valor y Pablo Ruz, respectivamente, que entran a formar parte de este organismo asesor. Quedan por nombrar aún otros tres vocales -no políticos- por parte de la presidenta de la Diputación, Luisa Pastor, que quiere consensuar con el grupo socialista.

La decisión sobre el equipo directivo del Gil-Albert, al frente del cual se encuentra Francisco Sánchez, se adoptará en breve.