Cuina i Tertúlia celebró el jueves la cena de gala anual con la que tradicionalmente cierra el curso gastronómico. El acto sirvió para que Mª Carmen Vélez, presidenta de la asociación que agrupa a 18 restaurantes de Alicante y otras ciudades de la provincia, resumiera la difícil situación por la que atraviesa el sector y para que el presidente de la Diputación, José Joaquín Ripoll, compareciera públicamente como tal ante sus profesionales por última vez.

Vélez, propietaria y cocinera de La Sirena, en Petrer, se refirió en su intervención a un curso muy difícil a causa de la situación económica, que ha llevado a Cuina i Tertúlia, como a la restauración en general, a mantenerse en un estado de introspección y de reflexión, sin actos pomposos ni ostentación de ningún tipo, y agradeció a los proveedores de sus negocios, ampliamente representados entre los 170 invitados al acto, su paciencia y su apoyo.

Por su parte, Ripoll evocó sus tiempos de proveedor de alguno de esos establecimientos, desde el negocio familiar de panadería, y se mostró orgulloso del lugar destacado que ocupa la restauración alicantina a nivel nacional e internacional. Puso de manifiesto la importancia en ese sentido del relevo generacional que se ha producido en muchas de nuestras empresas familiares de restauración, pero no hizo alusión alguna al congreso Lo Mejor de la Gastronomía, pese a la reciente asignación de 600.000 euros que él mismo firmó, ya como presidente en funciones, para un evento que ha sido lo más destacado de su gestión en este campo.

En el transcurso de la velada, Cuina i Tertúlia hizo entrega de los galardones que anualmente concede a destacados profesionales de la restauración. En esta ocasión, Mercedes Blasco, del Mesón Ino de Mutxamel, y José Piera, del restaurante El Pegolí de Dénia, fueron nombrados Cuiner d'Honor, así como José Francisco Izquierdo, de la cafetería Yale de Alicante, que ha sido durante años presidente de la Asociación Provincial de Hostelería. También se nombró Associat d'Honor a Juan Decouty, del Auberge de France, veterano miembro fundador de la asociación, y se hizo una mención especial a otro de sus asociados, el restaurante Dársena, que celebra este año su quincuagésimo aniversario.

El acto tuvo lugar en las Bodegas Enrique Mendoza, en L'Alfàs del Pi, donde el restaurante El Xato, de La Nucía, sirvió una espléndida cena con los platos tan actuales como arraigados de Cristina Figueira y la magnífica sumillería de Francisco Cano. Junto al chardonnay de Enrique Mendoza, su moscatel y su reserva Santa Rosa, El Xato sirvió un gazpacho de kumato sedoso y profundo, un tataki de bonito de reminiscencias tan cosmopolitas como locales, un sabroso bacalao confitado y un suculento solomillo de cerdo, tras un deslumbrante festival de doce tapas en el cocktail y antes de una golosa crema de limón con brioche de almíbar al romero, helado de turrón y merengue de miel. El Xato es la más reciente incorporación a Cuina i Tertúlia y por primera vez asumía el papel de anfitrión, reto que superó con un notable éxito ante una nutrida representación de la sociedad provincial, con los profesionales de los distintos ramos de la gastronomía en un lugar destacado.