¿Qué balance hace de su primera temporada como matador?

El balance ha sido muy bueno porque he toreado cinco corridas y en las cinco he salido por la puerta grande, así que muy positivo para el primer año. Es complicado en cuanto a conseguir contratos, estás muy nuevo, no te han visto, pero también estás mucho más animado, con más ganas, es un nuevo reto y como todo lo nuevo, pues lo afrontas con muchas ganas.

¿Ha notado especialmente el paso del novillo al toro?

La embestida del toro es diferente a la del novillo, es como cuando pasas la pubertad que de ser un chiquillo pasas a ser un hombre, al toro le pasa lo mismo. Las ideas no son las mismas, desarrolla antes y cualquier fallo por pequeño que sea en un toro lo acusas más, aprenden antes. La gente habla del tamaño, pero no, donde se nota es en las ideas. Y también se nota en los compañeros de cartel, claro.

¿Ha estado a gusto con ellos?

Sí, se han portado todos fenomenal conmigo, hay una amistad y una rivalidad en la plaza. Especialmente he toreado con Padilla y se ha portado siempre geninal dentro y fuera de la plaza. En esta primera etapa ha supuesto un gran apoyo.

¿Ha sido como esperaba?

Sí, vienes con idea, llevas como novillero un tiempo y además vas a las corridas, estás metido en el ambiente y a los compañeros los conoces y por suerte estaba mi padre que tenía amistad con muchos de ellos. A veces se sorprenden por ser el hijo de quien eres pero por otro lado te reciben con mucho cariño.

¿En qué plaza se ha sentido más a gusto en este primer tramo?

Yo siempre me siento a gusto en Alicante. El día de la alternativa fue especialmente bonito por el hecho de que me la diese mi padre pero también porque fuese en mi plaza, siempre me he sentido querido y arropado por la gente. Cuando ha habido algún momento de duda frente al toro, la gente me ha empujado y ayudado a que esa duda se convierta en ganas y en querer hacerlo bien.

¿Espera notar hoy esa complicidad?

Mi cita alicantina es en la que más me juego al estar empezando la temporada. Es donde me pueden ver y la verdad es que le tengo mucho cariño y respeto a esta plaza y siempre que vengo aquí tengo esos nervios especiales por saber que me voy a encontrar con mi gente.

Además abre la feria

Sí, empieza la feria y empieza mi carrera como matador en Alicante porque realmente como matador es el primer año y espero que todo el trabajo en el campo, los entrenamientos y el esfuerzo que he hecho este invierno, así como la madurez que puedo haber llegado a alcanzar se note hoy.

¿Tiene ya firmados más contratos para la temporada?

No es lo mismo salir hoy con ovaciones que con cuatro orejas. Alicante suena mucho, es una feria buena y me abriría muchas más puertas. Evidentemente no es Madrid o Sevilla pero si que ayuda mucho. Depende mucho del resultado para que los contratos se animen porque de momento tengo una temporada buena pero tiene que ser mejor. No me quejo pero hay que apretar.

¿Tiene ya fecha para ir a Madrid?

Madrid es una plaza muy complicada, te lo da todo o te lo quitaasí que no puedes ir precipitadamente, tienes que ir con una experiencia y una técnica muy pulida. En Madrid sale el toro que te hace pensar y has de solventar situaciones en décimas de segundo, para lo que has de estar muy toreado. Es cierto que podía haber ido este año y jugármelo todo pero teniendo en cuenta lo poco que había toreado no lo vi conveniente. Me hace mucha ilusión la confirmación y el día que vaya quiero ir preparado y darlo todo.

El público en Las Ventas es más exigente

Allí no perdona. Tu primera tarde en Madrid es muy importante porque si estás bien el público será más receptivo para la próxima pero si no transmites lo que quieres cuesta mucho entrar. La última tarde de mi padre allí fue una puerta grande y eso agranda la presión. No he ido por decencia y dignidad torera no por miedo.

¿Le acompaña su padre a las corridas?

Es muy suyo, un día le apetece estar en el callejón y otro se sube a la segunda andanada, así que no sabemos qué hará hoy. En los compromisos importantes y en el campo cuando he matado toros ha venido a aconsejar, a pulir y a ayudar. Es como la gripe, está siempre en el aire y a veces se manifiesta, pero en el buen sentido, claro.

¿Le hubiera gustado torear el día de San Juan, el 24?

Por supuesto, para cualquier alicantino es el día grande de la feria y es a lo que aspira un torero de la tierra, pero los carteles los confecciona el empresario y no es tan fácil como se ve desde fuera. De momento me conformo con poder demostrar que soy un torero de aquí.

¿Cómo ve el escalafón actual de cara a abrirse un hueco?

El escalafón está arreando mucho, es una época muy buena. Hay un abanico muy amplio de toreros arriba, toreando mucho y además hay uno de la tierra, Manzanares, que es quien está marcando la temporada, ha estado sensacional en Sevilla y Madrid. También está El Juli, para mí uno de los toreros más capaces de la historia porque a cualquier toro le saca faena y los somete hasta el muletazo infinito de romper la cintura atrás. Y Morante que tiene ese carisma especial y ese arte indefinible. Y El Cid, Perea, Castella...

¿Se ve con ellos dentro de poco?

Sí, si no no estaría aquí perdiendo el tiempo. Yo creo que tengo condiciones, tengo capacidad y tengo afición y ganas para llegar a estar ahí y el día de mañana compartir cartel con ellos.

¿Y los Valdefresno de hoy?

Bien, siempre ha sido una ganadería puntera, de referencia en Salamanca y le tengo mucha fe a la corrida, he visto grandes toros, que transmiten. El encaste de Atanasio siempre me ha gustado.