Poco deben de supervisar Ciudad de la Luz y el Instituto Valenciano de Cinematografía, a cuyos respectivas cúpulas se sitúan Elsa Martínez y Nuria Cidoncha, respectivamente, los proyectos que financian o en los que colaboran económicamente. Porque en el caso de la serie Crematorio, basada en la novela del escritor valenciano Rafael Chirbes y estrenada por Canal+ esta misma semana, si algo se denuncia es la corrupción urbanística que ha azotado a la costa valenciana durante los últimos años y la forma en la que políticos y empresarios se han hecho ricos sin escrúpulo alguno con la destrucción del litoral y la construcción desaforada.

En un momento en el que las denuncias de corrupción llenan páginas de diarios, son motivo de debates parlamentarios y tiene implicada a una parte de la clase política, la propia directora de Ciudad de la Luz, Elsa Martínez, llegó alabar en público la serie durante la presentación de la misma y no dudo a la hora de reflejarlo en las propias notas de prensa que la Generalitat envió tras el acto de presentación de la misma en Madrid.

"Con Crematorio Ciudad de la Luz realiza una apuesta firme por el rodaje de series de televisión de prestigio", afirmaba Martínez en un acto al que también acudió Cidoncha, cuyo departamento ha financiado la serie de ocho capítulos de duración con 400.000 euros de los cinco millones que ha costado el proyecto. De tal manera que sus logotipos aparecen en los carteles promocionales y en los propios créditos de la serie.

"Esta serie es una producción valiente que está a la altura de la calidad audiovisual de las series norteamericanas que tanto están triunfando entre la crítica a nivel internacional", añadió Martínez en una nota que recordaba la vinculación directa de la Comunidad Valenciana a la serie desde su concepción.

Rodada en localizaciones de la provincia de Alicante, como los estudios de Ciudad de la Luz y las localidades de Elche, Benidorm, Novelda, Altea, Calpe, El Campello y Santa Pola, la serie, que sitúa la acción en un pueblo ficticio llamado Misent, pero que respondería por sus descripción a Dénia o Xàbia, ofrece "un panorama terrible: la corrupción como savia que recorre todo el cuerpo de una sociedad en la que la destrucción del paisaje adquiere valor de símbolo", recordaba la editorial Anagrama en la ficha de la obra, a través de constructores sin escrúpulos, mafiosos rusos, intermediarios corruptos y una larga saga de personajes ambiciosos. Con esta novela de 2007, el escritor de Tavernes de la Valldigna ganó el Premio Nacional de la Crítica.

"Los novelistas no son moralistas, contamos lo que hay", dijo Chirbes cuestionado sobre una novela que, según confesó espantó a sus amigos y al editor por su contenido. "De alguna manera en mis novelas aparece la parte de mi generación que se ha manchado de verdad y lo cuenta, y la otra que ha querido mantener la inocencia como si se pudiera estar en el poder y ser inocente", añadió el escritor para recordar que "la especulación es cáncer en general que se ha metido el dinero. Hubo una temporada que se metió en la bolsa. Y cuando habían metido todos los pobres el dinero la bolsa cayó y se quedaron sin un duro. Pues ahora han hecho lo de los pisos", concluyó el novelista.

Protagonizada por Pepe Sancho y producida por el también valenciano Fernando Bovaira, el rodaje duró ocho semanas.