El científico y marino noveldense Jorge Juan no copió la tecnología inglesa en los barcos españoles del siglo XVIII como se pensaba hasta el momento. Al menos, esta es la conclusión que han extraído numerosos expertos del Centro Subacuático de Cataluña que, en colaboración con el Museo Nacional Naval, han estudiado durante más de tres años el barco "El Triunfante" de Jorge Juan, que permanece hundido en la costa de Roses desde el 5 de enero de 1795.

De este modo, según señala el director del proyecto, Gustau Vivar, "Jorge Juan lo que hizo fue aplicar lo mejor de la técnica española y la inglesa, siendo este tipo de barcos un ejemplar único, que contaba con la tecnología más avanzada de España e Inglaterra. Por lo que no copió exactamente el modelo inglés, sino más bien hizo una mezcla de una y otra. Cogió lo mejor de ambas e hizo un sistema propio".

El barco "El Triunfante" de Jorge Juan es la única prueba con la que cuentan los arqueólogos para estudiar las técnicas de construcción empleadas por el científico, ingeniero y matemático. Los conocimientos adquiridos por el marino tuvieron lugar en su misión secreta en Inglaterra, cuando enviado por el Marqués de la Ensenada, por el día se convirtió en un prestigioso matemático de la Academia de la Ciencia y, por la noche, en un espía que pretendía conocer todos los entresijos de los mejores y más audaces navíos de la época que estaban en Inglaterra.

Sin embargo, este modelo y sistema propio que llegó a concebir Jorge Juan apenas tuvo repercusión ya que el Marqués de la Ensenada fue el gran valedor del marino noveldense y, aunque le prestó todo su apoyo para imponer un nuevo nivel de construcción, en cuanto cayó y fue desplazado de la esfera política y del poder, con él se fue Jorge Juan.

"Se hicieron muy pocos barcos con el estilo de Jorge Juan, no más de una docena. Cuando el Marqués de la Ensenada pierde su posición, se forma un comité de expertos en Cádiz que señala que el sistema realizado por Jorge Juan es anticuado y se pasa a la construcción del sistema español de siempre", apuntó Gustau Vivar.

Por su parte, el trozo que se conserva de "El Triunfante" bajo el agua es gigantesco. Nada menos que 50 metros de barco, que hacen imposible su extracción, como apunta Vivar, pese a que su conservación resulta ser excelente. "Lo ideal sería sacarlo y convertirlo en un museo. Pero solamente para el barco se necesitaría un edificio entero, además de mucho, mucho dinero. Luego está la inversión que requeriría la conservación del barco. Una conservación que, por cierto, no sabríamos cómo sería a ciencia exacta. Porque sabemos qué química utilizar con trozos de madera, pero no sabemos si esto funcionará para un barco tan grande como ya ha pasado en otros países", apunta el director del proyecto.

Ante estas circunstancias, el Centro Subacuático de Cataluña apuesta por convertir la zona de Roses, donde está hundido "El Triunfante" de Jorge Juan, en un museo bajo el mar en el que se facilite las inmersiones turísticas. Para ello, no hace falta ser un buzo profesional ni nada por el estilo, ya que la profundidad a la que se encuentra el barco, unos seis metros, resulta accesible para todo el mundo.

"Nosotros apostamos por controlar los yacimientos arqueológicos desde dentro del mar, tal y como marca la convención de la Unesco, que aconseja que los yacimientos subacuáticos tienen que quedar ahí, y no tocarlos a no ser que exista un grave riesgo de expolio o de destrucción. Pero este no es el caso", afirma Gustau Vivar.

De hecho, esta novedad turística de visitar los yacimientos con submarinistas ya se ha impuesto en otros lugares y está siendo un éxito en Cataluña. "Lo empezamos en su día con el de Ampùries, abierto también a un público no especializado, y funciona muy bien. También, hace poco, un grupo de submarinistas nos pidieron ver "El Triunfante" y lo vieron sin ningún problema y se interesaron sobre cómo trabajábamos", comenta el director del proyecto.

Las investigaciones realizadas por el Centro Subacuático de Cataluña con "El Triunfante" se publicarán a lo largo del 2011 en un libro y su director, Gustau Vivar, tampoco descarta la organización de una exposición con todos los documentos y materiales recogidos sobre este navío del siglo XVIII en España.

Recuperan objetos y armas del siglo XVIII dentro del navío

Otra de las mayores sorpresas que ha deparado "El Triunfante" de Jorge Juan ha sido el tesoro que escondía en la barriga de la nave. El caso es que, según señala Gustau Vivar, muchos ciudadanos ya conocían el hundimiento de este barco, que fue sometido a numerosos expolios. Sin embargo, al interior de la nave, que estaba boca abajo, no pudieron llegar ya que los buceadores temían quedarse atrapados. Por ese motivo, cuando el Centro Subacuático de Cataluña ha logrado colarse en el interior de "El Triunfante" han dado con todo tipo de objetos del siglo XVIII y que estaban dentro de la nave como ropa, armas, zapatos, botones, cerámica, balas y todo tipo de herramientas para el barco.