El escritor barcelonés Enrique Vila-Matas, que inauguró ayer en el Aula CAM de Alicante el ciclo de conferencias Literatura y vida, reivindicó la figura del escritor francés Valéry Larbaud por su labor como "descubridor" de la literatura de Gabriel Miró en Francia. "Larbaud fue uno de los mejores escritores franceses del siglo pasado y vivió en Alicante entre 1907 y 1910, donde fue amigo de Óscar Esplá, José Guardiola o Gabriel Miró y fue su descubridor en Francia, igual que de Ramón Gómez de la Serna, ya que introdujo mucha literatura española en París", explicó Vila-Matas, quien apuntó que Larbaud, que recogió sus vivencias en Diario alicantino, "tenía un gran recuerdo de las noches en la Explanada y de la delicia de vida en Alicante. Supongo que algún día Alicante se acordará de él y estaría bien que le dieran una calle".

El escritor expuso también ante el público un nuevo anexo de su novela Dublinesca, un relato que se llamará Chet Baker piensa en su arte, donde juega con la idea de que un crítico de literatura construye una especie de "frankenstein literario", que conjuga el realismo asequible de Georges Simenon y la dificultad lectora de James Joyce, "con el que se resolvería esta dicotomía entre la alta literatura y la literatura popular de calidad".

Además, Vila Matas explicó cómo es su proceso de escritura "en directo" a través de lo que de él comenta una autora francesa.