SE LE CONOCÍA COMO "EL GENIO", y no es para menos. Mostró muy pronto su talento con La guerra de los mundos, con la que consiguió desatar una ola de pánico. Su primera película, Ciudadano Kane, es una obra maestra. Welles amaba España, y se le podía ver normalmente en las corridas de Valencia, Madrid y Pamplona. Allí conoció a Cano, con el que compartió muy buenos momentos.