Aprovisionados de un bocata y con el programa del Festival de Cine en la mano llegaron Luis y Rocío, de 31 años, a la plaza del Ayuntamiento media hora antes de que empezara la proyección. Trabajadores de la Diputación ambos, cada uno venía de otro acto anterior del festival pero el de ayer les apetecía más por ser la novedad este año -la exhibición de cortos y largometrajes al aire libre en la renovada plaza del consistorio alicantino- y porque la noche invitaba a ver una película al raso. "Ojalá la gente se anime y venga porque yo esto lo haría todos los días, me parece estupendo", señalaba Luis, amante del cine, que intenta cada año no perderse nada del certamen cinematográfico.

Ayer, sin embargo, no hizo falta llegar con antelación a la plaza para coger sitio porque de las más de 400 sillas instaladas se ocuparon poco más de un centenar, pero el director del festival, Vicente Seva, se dio por satisfecho con la asistencia del primer día de cine al aire libre. "Formáis parte de un experimento. Queremos sacar el festival a la calle, sacar partido a esta plaza y que se convierta en una sede más", explicó al público el responsable, quien señaló que el próximo año se proyectarán también cortometrajes a concurso "ya que el sitio es perfecto y ahora hay que promocionarlo. Hace dos años hicimos algo en la playa pero en esta época aún hace frió por la noche; aquí no, el sitio es idóneo".

La proyección de la película Los managers, prevista para las 10 de la noche de ayer, se retrasó algo más de lo previsto porque su director, Fernando Guillén Cuervo -galardonado el día anterior con el Premio Especial Ciudad de Alicante- finalmente se quedó un día más en la ciudad y asistió también a la presentación de la cinta. "He hecho un esfuerzo relativo por quedarme porque hoy me he tomado un arrocito aquí, que vamos...", bromeó el cineasta con el público de la plaza, espacio que también defendió para ver películas "porque se puede fumar, comer pipas, palomitas y chuches, no más".

Antes, los asistentes comenzaron a sonreir con Paco, el cortometraje con el que debuta en la dirección el actor Jorge Roelas -el popular Marcial de Médico de Familia, entre otros papeles televisivos-. Una historia "tierna y algo divertida donde yo estoy estupendo", avanzó él mismo a los asistentes, tras reconocerse encantado de "participar en este experimento, de arrancar con una carrera nueva y de que el corto se proyecte aquí".

La plaza del Ayuntamiento volverá a convertirse en sala de cine abierta esta noche con un maratón de cortometrajes de comedia, a la que seguirá mañana la película de los Monty Python La vida de Brian; el sábado se convertirá en el escenario de la gala de clausura del festival y el domingo se proyectará otra hora y media de comedia.

El público que acudió ayer era heterogéneo, tanto jóvenes como de la tercera edad, y agradeció la iniciativa: "Nosotros pensamos venir todos los días. Nos hemos enterado de casualidad al pasar por aquí y ver el tinglado éste", señaló ayer una pareja de alcoyanos, José Vicente y Rosa Mari, de 64 y 60 años, que pasan temporadas en Alicante y reclaman "más información de la oferta cultural en las oficinas de turismo". Otros sí estaban al tanto de la cita, como Lidia y Santi, que aseguraron repetir "porque es una buena iniciativa", mientras Emilia y Domingo, jubilados, se quejaban de no poder quedarse "porque el último autobús para llegar a casa pasa a las 22.30. A ver si lo alargan, que también nos gusta el cine".