Miguel Hernández es de sobra conocido como poeta y dramaturgo pero poco se conoce de su faceta como periodista, «aunque en realidad es lo que quiso ser de joven y así se lo manifiesta al canónigo de Orihuela y amigo de la familia Luis Almarcha, a quien le dice con 20 años que ha salido una convocatoria para ingresar en la Escuela de Periodismo y se muestra interesado en participar», apunta el catedrático de Periodismo de la Universidad Complutense y presidente de la Asociación de Amigos de Miguel Hernández, Francisco Esteve, con quien ayer arrancó la semana dedicada a la figura del poeta en el Forum 80 Mundos, en colaboración con la Plataforma de Iniciativas Ciudadanas (PIC).

Esteve, también responsable de la cátedra Miguel Hernández de la Universidad ilicitana, afirma que el autor de El rayo que no cesa «manifiesta esa vocación periodística, que no pudo materializar en ese momento, aunque luego tuvo una relación estrecha con el periodismo durante toda su vida», que se resume en más de un centenar de artículos y colaboraciones en distintas publicaciones.

De sus comienzos en la prensa local de Orihuela con sus poemas de juventud en el periódico El pueblo de Orihuela y las revistas Voluntad –fundada por Ramón Sijé– o Actualidad, Miguel Hernández pasó a realizar colaboraciones poéticas en diarios de Alicante y Murcia, hasta su paso a diarios de tirada nacional como El Sol de Madrid –dirigido por Ortega y Gasset– así como en la Revista de Occidente y en Cruz y Raya, de Bergamín.

Pero Miguel Hernández no sólo escribió poemas, sino que fue «columnista, crítico, cronista de guerra, editorialista, practicó la entrevista y el reportaje y también participó en la creación de las revistas oriolanas El Gallo Crisis o Silbo. Durante la guerra, colaboró en los periódicos del frente y llegó a crear publicaciones como Frente extremeño y Frente sur», apunta el especialista, que concluye que «su vida estuvo totalmente ligada al periodismo, desde que empezó a los 20 años deseando ser periodista hasta el final de su vida, ya que su condena a muerte fue por ser periodista, porque tomaron como fundamentos todos los recortes de prensa que escribió».

Prueba de ello, según mantiene Esteve, es que al poeta oriolano le juzgó un tribunal militar especial de prensa «y murió víctima de su hemeroteca, de sus artículos periodísticos. No podían acusarle de delitos de sangre y se le condenó por sus crónicas, por su actividad como agitador de conciencias».

A juicio del catedrático, aunque su faceta periodística tuvo especial relevancia en la revista de los años 30 El Gallo Crisis, que emulaba a la de Bergamín y que tuvo repercusión nacional, mientras que, en la prensa nacional, destaca sus aportaciones a la Revista de Occidente y Cruz y Raya de Madrid, «que provocaron la admiración del Premio Nobel Juan Ramón Jiménez, quien publicó un artículo haciéndose eco del poema Elegía a Ramón Sijé plasmado en Revista de Occidente, y del que dijo que "cualquier amante de la poesía pura debería leer esa loca poesía"».

PROGRAMA

Hoy Martes, 4 de mayo20 horas-

Miguel Hernandez, poeta. Debate entre José Carlos Rovira y Carmen Alemany.

Miércoles, 5 de mayo20 horas

- Miguel Hernández, creador de un mundo ético. Ponencia de Jesucristo Riquelme.

Jueves, 6 de mayo20 horas-

Miguel Hernández, su compromiso vital. Ponencia de Enrique Cerdán Tato y Manuel Parra y presentación de la revista Auca.