Mareos, visión doble, náuseas o desequilibrios son algunos síntomas que pueden experimentar temporalmente tras la proyección de una película en 3D algunas personas con pequeños problemas visuales no detectados, según ha advertido el Colegio de Ópticos Optometristas de la Comunidad Valenciana, que estima en un 10 por ciento la población que puede verse afectada por este tipo de disfunciones binoculares o forias, es decir, que no ven correctamente con ambos ojos en tres dimensiones.

Ante el auge del cine tridimensional -con películas como "Avatar" o "Up"- los ópticos han percibido una señal de alarma en estas proyecciones "que juegan con la profundidad y el relieve y dejan de lado a una parte de la población que tiene deficiencias en este aspecto y a quienes estas películas resultan incómodas porque les exige un sobreesfuerzo, y por eso hay gente que sale con angustia o mareos", indica el delegado en Alicante del Colegio de Ópticos, Juan Carlos Linero.

La foria es un estado de relajación en el que los ojos pierden momentáneamente la coordinación entre ambos, un problema muy habitual que se suele compensar con la propia musculatura del ojo. "Estas personas ven en tres dimensiones pero una película en 3D aumenta la demanda de esfuerzo y si ésta dura tres horas, más", apunta Linero, que añade que la foria es una desviación dentro de los márgenes, y cuando esta es completa y los ojos no trabajan armónicamente se denomina estrabismo.

En este caso, al igual que sucede con la ambliopía -llamada también "ojo vago", donde el cerebro trabaja con la imagen de un solo ojo- la persona no es capaz de ver las películas en tres dimensiones, a no ser que se detecte y se trate. Igualmente, la foria se puede corregir con lentes correctoras o con ejercicios visuales. Por ello, los ópticos recomiendan realizar una revisión binocular y consideran que las películas en 3D deberían advertir de estos efectos.

A su vez, Carlos Laria, oftalmólogo infantil de VISSUM, apunta que ante una alteración, "es importante acudir a un oftalmólogo especializado en estrabismos para realizar una correcta valoración de un problema que hasta ese momento les ha podido pasar desapercibido, sin que ello signifique gravedad alguna a priori".

Por otra parte, Teodoro Ignoto, director de Técnica Electrónica, empresa responsable de instalar el sistema 3D en algunos cines de Alicante admite que hay ciertas personas que pueden acusar estos problemas "pero no está muy claro ni hay muchos estudios al respecto al ser una técnica relativamente reciente, y se trata de una minoría muy restringida, que con el 3D descubren que tienen algún tipo de problema de visión", tras aclarar que "también depende del sistema en 3D que se utilice y, de los tres que hay, el cromático es el más natural y el menos dañino". En cualquier caso, si hubiese que hacer alguna advertencia, apunta, "correspondería hacerlo a Sanidad".

RECOMENDACIONES

Es posible que en los primeros minutos de visión de una película en 3D los espectadores sientan un pequeño malestar, pero es el tiempo que los ojos necesitan para adaptarse. Cuando el cerebro entiende lo que ocurre y la coordinación con la musculatura ocular se equilibra, se puede disfrutar de la película.

Las personas que usen corrección óptica -gafas, lentes- deben utilizarlas debajo de las gafas de 3D, pero si se tiene una foria (problema de visión binocular), ésta se puede manifestar a pesar de llevar corrección.

Si el espectador siente algún malestar viendo una película con tecnología 3D es conveniente visitar al óptico optometrista para una revisión binocular, ya que es posible que tenga una foria que ha pasado desapercibida.