Sólo 1.700 personas pudieron disfrutar anoche del concierto que Alicia Keys ofreció en el Teatro Real de Madrid.

Con media hora de retraso y con una duración de apenas una hora, la cantante estadounidense ofreció su mejor soul y pop sobre el escenario. Fueron diez nuevas canciones del nuevo álbum de la artista estadounidense, "The element of freedom", con las que la artista de 28 años hizo disfrutar a un público entregado.

Alrededor de 200 personas se quedaron con invitación y sin poder acceder al recinto para ver el único concierto de Alicia Keys en Madrid este año.

La joven diva del 'rhythm and blues' conquista las listas de éxito. En su poder siempre el número uno, además de doce Grammys y más de treinta millones de discos vendidos.