La Asociación Contra la Tortura y el Maltrato Animal (Actyma) lideró ayer un encuentro frente a la plaza de Toros para protestar por un lado por la fiesta taurina y, por otro, por la situación "catastrófica" de los animales del circo Alaska -ubicado en el mismo coso taurino-. La reunión, que congregó a unas cuarenta personas, sirvió para recordar la iniciativa de junio en la que se simbólicamente se renombró la plaza de toros como "de torturas". Iniciativa que va a recorrer mensualmente cada una de las 438 plazas de toda España. "El ser humano no necesita maltratar animales para disfrutar, así nos descalificamos a nosotros mismos", aseguró Actyma.