Alicante celebra hasta el jueves sus I Jornadas de Animación a la Lectura, bajo el lema "Érase una vez...". Emilio Pascual, Premio Lazarillo y Premio Nacional de Literatura, inauguró ayer el ciclo con una conferencia dedicada a la figura de Charles Perrault, escritor francés, reconocido principalmente por haberle dado forma literaria a cuentos clásicos infantiles de tradición oral como "Caperucita roja" o "El gato con botas".

- ¿Qué puede contar sobre Charles Perrault?

Que fue de los primeros autores europeos que decidió convertir en literatura la tradición oral de los cuentos. Además les añadió pequeños matices, dando lugar a una escritura distinta, que hace cercanos a los cuentos, aunque sean muy lejanos en el tiempo. Describía hábitos y costumbres actuales. Ahí radica la gracia.

- También añadió las moralejas.

Las moralejas son guiños permanentes al lector adulto. Fue pionero a la hora de darse cuenta de ello. De darle ese toque irónico a las historias, esa doble lectura.

- ¿Cuál es la situación actual de la literatura infantil en España?

Está sujeta a reestructuraciones. Algunos autores consideran que la buena literatura infantil es la que pueden leer los adultos. Pero también existe literatura "basura". El principio de que todo vale, con tal de que lean los niños, no es válido. Hay que saber valorar un texto, criticar, discernir...

- ¿Podemos hablar de una época de repunte en este campo?

Teniendo en cuenta que estamos en un país donde hace 50 años no había literatura infantil, la situación es brillante. Existe un filón literario interesante, aunque siempre se cuela algo malo. Pero, en general, la salud de los textos infantiles es muy buena.

- ¿Qué papel tienen las ilustraciones en este tipo de literatura?

Las ilustraciones ayudan a leer hasta que los niños se crean su imaginario propio. Cuando el lector infantil se convierte en adulto, la ilustración sufre una transición. Va dejando terreno para convertirse en obra de arte.

- ¿Las editoriales apuestan por la literatura infantil?

Hay editoriales que sólo viven de los libros infantiles. Estos libros tienen un alto coste, pero muchas veces se venden más que la literatura adulta. Editoriales, libreros y bibliotecas atienden bien a la literatura infantil.

- ¿Cuál es la función que desempeñan estos libros?

Los niños reciben un reflejo a través de los libros y estudian cómo es la sociedad en la que van a vivir. Abren una puerta de esperanza para la educación, tanto artística como literaria. Por eso hay que saber que no valen todos los libros, que se puede disfrutar descodificando un texto.