El recién galardonado con el Premio Nacional de Ilustración 2009, Miguel Calatayud, ha destacado hoy que en la literatura infantil y juvenil la ilustración "es imprescindible para que los chicos no solo lean sino que también miren" porque forma parte del código visual que les rodea.

En declaraciones a EFE tras conocer el fallo del premio que concede el Ministerio de Cultura, Calatayud ha mostrado su sorpresa por el galardón "aunque lleve toda la vida en este oficio".

Miguel Calatayud (Aspe, Alicante, 1942) comenzó en el mundo de la ilustración a finales de los años 60 con un particular enfoque estético y conceptual, tanto en la historieta gráfica como en los libros infantiles y juveniles o en el de la publicidad.

Ha publicado 49 libros de ficción ilustrados, seis de los cuales con textos e ideas propios; ha colaborado en otros 19 libros y ha publicado 10 álbumes de historieta gráfica de los que también es autor de los textos.

Calatayud ha defendido un tipo de ilustración "que conecte con la actualidad gráfica, que evite un realismo que no aporta nada y que refleje la personalidad y la autoría del ilustrador".

Por eso, aboga por un lenguaje que conecte cualquier tendencia pictórica, "desde las vanguardias hasta lo que se está haciendo actualmente".

"Los ilustradores relatamos cosas visualmente, la figuración es importante y además es un trabajo muy divertido", ha señalado Calatayud quien se muestra entusiasmado con su trabajo.

Precisamente, Calatayud trabaja en las ilustraciones de un libro infantil, que publicará la editorial gallega Kalandraka, un cuento tradicional "a medio camino entre la selva y la ciudad de París" y en el que el dibujo es el protagonista.