E l oceanógrafo e investigador de la Universidad de California Jeremy Jackson denunció ayer el «colapso inminente» de los ecosistemas marinos, que hace que nos estemos quedando sin peces con los que alimentarnos, ya que prácticamente el 90 por ciento de los grandes han desaparecido. Así lo manifestó Jackson, Premio de la Fundación BBVA a la Conservación de la Biodiversidad, junto al oceanógrafo chileno Juan Carlos Castilla, el Grupo Balear de Ornitología y Defensa de la Naturaleza (GOB);, la Fundación para el Ecodesarrollo y la Conservación de Guatemala (FUNDAECO); y el naturalista Joaquín Araújo.

Los galardonados comparecieron ante los medios de comunicación antes de recibir los premios de manos del Príncipe de Asturias y el presidente de la Fundación BBVA, Francisco González.

El profesor de la Universidad Pontificia Católica de Chile Juan Carlos Castilla aseguró que asistimos a una gran cantidad de cambios globales que están ocurriendo simultáneamente, de los cuales el cambio climático es sólo uno de ellos. Por parte del GOB, su presidente Macía Blázquez, manifestó su orgullo por que esta organización haya contribuido a la contención y a políticas en materia turística y litoral en Baleares y aseguró que la sociedad civil balear es la principal merecedora del premio. El máximo responsable de FUNDAECO, Marco Cerezo, puso de relieve que esta Fundación lucha al mismo tiempo por conservar la naturaleza y erradicar la pobreza en las zonas rurales, a la vez que hizo un llamamiento urgente a la solidaridad de los países desarrollados y las grandes empresas para preservar los recursos naturales de Guatemala.

El naturalista Joaquín Araújo, premiado por su contribución a la difusión del conocimiento y sensibilización en conservación de la biodiversidad, dedicó el galardón a los profesionales de la comunicación del área medioambiental.

El Príncipe de Asturias consideró ayer que «conciliar la protección del medio ambiente con el desarrollo económico y social es uno de los principales desafíos». Acompañado de Doña Letizia, que está ya en avanzado estado de gestación, Don Felipe entregó los cinco galardones de esta segunda edición, cuya dotación global de más de un millón de euros es la más elevada a escala internacional de los que premian la conservación de la biodiversidad.

Don Felipe, quien evaluó muy positivamente a cada uno de los premiados, abogó por el compromiso personal y colectivo desde todos los ámbitos - incluidos los medios de comunicación - con la protección de la naturaleza que «constituye uno de los objetivos de mayor importancia para el presente y el futuro de la sociedad».