El Lucentum hará todo lo posible por continuar con vida pese a la enorme decepción de no poder jugar en la ACB. El plazo acaba hoy, pero es anecdótico. El problema no es el tiempo, sino los cerca de 1,8 millones de euros que tenía que desembolsar en concepto de "fondo de regulación de ascensos y descensos".

El siguiente interrogante es seguir en la Adecco Oro o no. Ni Lucentum ni Ayuntamiento, que es el máximo accionista de la entidad, quieren que el proyecto finalice, pero al mismo tiempo existen muchas dudas sobre la viabilidad de seguir en la categoría de plata. Para empezar, la masa social experimentará un descenso muy considerable tras quedarse sin ACB después de haberla ganado en la cancha y se notará a buen seguro en el número de abonados. El jugar sin tener posibilidad de ascender, a priori, no anima a seguir luchando. Pese a todo, el Ayuntamiento está dispuesto a mantener su aportación de medio millón de euros para la próxima temporada.