El Unicaja resucitó hoy al ganar por 72-60 al Lucentum Alicante, rival directo en la lucha por la fase por el título, y volvió a saborear un triunfo tras cinco derrotas seguidas en liga, con lo que superó su grave crisis de resultados en el debut como técnico de Luis Casimiro, sustituto del destituido Chus Mateo.
En el Lucentum Alicante, por su parte, no aparecieron sus mejores tiradores como Ellis, Dewar o Rautins, a lo que se unió que su juego interior no fue eficaz ni solvente, por lo que fue pereciendo en su intento de superar las adversidades a pesar de sus acercamientos en el marcador (23-19, m.15) tras un parcial de 0-7.
A partir de ese momento, los tiradores del Unicaja despertaron. El veterano escolta Berni Rodríguez, con dos triples consecutivos, señaló el camino de la victoria a los suyos, pero entre el base Rafa Luz, cedido por el Unicaja al Lucentum, Ellis y Dewar dieron emoción a la segunda parte, al llegarse con 38-30 al descanso.
Sin embargo, en la reanudación, el sistema ofensivo del Unicaja funcionó, sin apreturas, y además en los momentos clave llegaron los triples de Devries y Valters para dar ventaja a su equipo (48-32, m.23).
Este acierto en los lanzadores del Unicaja atemorizó al conjunto alicantino, que se mostró muy romo y timorato en el tercer periodo, al que se llegó con 55-43 en el marcador.
En el último cuarto, la eficacia del base letón Kristaps Valters, que acabó como máximo anotador del partido con catorce puntos, no bajó y catapultó a su equipo hasta una cómoda victoria por 72-60 que debe servir de trampolín a los malagueños para el último tramo de la liga, una vez superada la peor crisis de sus últimos tiempos.
El conjunto del debutante Casimiro cortó así la nefasta racha de quince derrotas en dieciséis partidos que llevaba y lo hizo con el mérito añadido de derrotar con una victoria muy trabajada y merecida, desde el inicio del encuentro, a un rival de fuste, el Lucentum, que se vio sorprendido por la buena defensa cajista.
El choque era transcendental para el equipo malagueño, sumido en una profunda crisis de resultados que llevó a la destitución a principios de esta semana del técnico Chus Mateo, mientras que ahora los andaluces igualan a catorce triunfos con los alicantinos y les superan provisionalmente en la clasificación, al colocarse sextos.
Quince derrotas en dieciséis partidos era una losa muy profunda para un equipo que había estado durante buena parte del campeonato entre los cuatro primeros puestos, si bien esta victoria balsámica devuelve a los del Martín Carpena a los puestos de la fase por el título.
El Unicaja, llevado por el apoyo de su público y motivado por la llegada de su nuevo entrenador, Luis Casimiro, supo gobernar durante los dos primeros cuartos a un Lucentum Alicante, algo alicaído y que no entró en juego hasta los instantes finales del segundo periodo.
Los cajistas forzaron la situación con su única arma, la defensa, que desestabilizó a uno de los mejores ataques de la Liga.
Con 21-12 acabó el primer cuarto y también con una sensación diferente a la de los últimos encuentros para los malagueños.
- Ficha técnica:
72 - Unicaja (21+17+17+17): Valters (14), Devries (5), Peric (2), Zoric (13), Freeland (12) -cinco inicial-, Lima (8), Rodríguez (10), Darden (6) y Rowland (2).
60 - Lucentum Alicante (12+18+13+17): Llompart (3), Stojic (-), Ellis (5), Ivanov (10), Kone (8) -cinco inicial-, Barnes (8), Dewar (10), Rautins (8), Freire (8) y Jodar (-).
Arbitros: Pérez Pizarro, Jiménez y Martínez Díaz. Sin eliminados.
Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo sexta jornada de la Liga Endesa, disputado en el Palacio de los Deportes José María Martín Carpena ante 8.100 espectadores.
