En ocasiones, la naturaleza puede llegar a sorprendernos y romper de lleno el famoso ciclo de la vida. Hay historias que enternecen a cualquiera, y esta es una de ellas. Un turista paseaba por el parque nacional Kruge, de Sudáfrica cuando se topó con una mamá leona muy especial.

Entre sus enormes garras, un pequeño antílope recién nacido se acurrucaba y recibía los arrumacos de la madre adoptiva, que lo trataba como a uno de los suyos. "Parecía que la leona llevaba un cachorro, sin embargo era una cría de antílope", comentó el turista.

Y aunque nada se sabe del destino de la pequeña cría, lo cierto es que la imagen deja a culaquiera sin palabras. Enternecedor.