Es unos de los candidatos a la presidencia del gobierno más atractivos, en el sentido más amplio de la palabra.

Nos atrae su discurso coherente, elegante y su mente rápida. Nos atrae su juventud, su físico, su sonrisa.

Es el “yerno ideal”.

Pero, qué más hay detrás de este candidato, aparte de su mensaje. Vamos a ver algunas claves que nos aporta la comunicación no verbal científica sobre él, y que debemos tener en cuenta a la hora de decidir nuestro voto.

  • Albert Rivera es controlador. En el sentido amplio de la palabra. Esto no es ni bueno ni malo a priori, siempre que no se llegue a ningún extremo. Una persona controladora es una persona a la que gusta tener todos los cabos atados, que no nadie se salga del plan previsto, que no haya sorpresas. ¿En qué podemos darnos cuenta de esto? Por un lado en su rotativo: tiene un rotativo derecho de preferencia. Es decir, suele hablar dándonos su lado derecho de la cara. Esto lo hace para poder mirar con su ojo derecho. Cuando hacemos esto, estamos en situación de control, vigilantes (puedes ver un ejemplo de rotativo derecho pinchando aquí).
  • Albert Rivera siente miedo. En realidad, nos ponemos nerviosos cuando nos enfrentamos a situaciones en las que tenemos miedo a algo: a no hacerlo bien, a no estar a la altura, a hacer el ridículo, a no conseguir nuestro objetivo, a que el otro sea mejor que nosotros, a que surjan imprevistos, etc. Esa emoción la intenta apaciguar a través de innumerables micromovimientos que, a poco que lo hayáis observado, habréis notado. Por ejemplo, hace balanceos del cuerpo de un lado a otro, tiene un micropicor contínuo en el dorso de la mano derecha, hace movimientos manipuladores con su ropa, hace el gesto de manos lavadas, etc. Todos estos gestos implican incomodidad, nerviosismo. Os quiero explicar también un micropicor que le he visto en alguna ocasión. Es el del meñique derecho. Fijaos primero en el vídeo (min. 0’10).

Nuestros dedos meñiques son los dedos de la armonía. Un dedo meñique que pica es el de una persona que se siente mal. En este caso, es el derecho. Albert Rivera se siente mal por la situación.

  • En cuanto a su estilo de comunicación, es fantástico. Conquistador, lo llamamos en comunicación no verbal científica. En concreto, conquistador alto negativo. Es decir, hace gestos envolventes que nos meten dentro de su burbuja, gesticula mucho con las manos para ayudarse a tansmitir mejor su mensaje. Por eso es conquistador. Es conquistador alto porque habla mucho. Si fuera conquistador bajo escucharía más que habla. Pero no es el caso. Le gusta hablar. Es conquistador negativo porque cree que los demás no son capaces de hacerlo igual de bien que lo hace él. Si pudiera, le quitaría la palabra a sus propios colaboradores, porque cree que él lo hace mejor. ¿No me creéis? Mirad este vídeo de la rueda de prensa que dio Ciudadanos al día siguiente de las elecciones autonómicas y municipales. Desde el principio se ve a Albert Rivera tremendamente tenso (manos lavadas, micropicor en el dorso de la mano derecha), mientras habla Inés Arrimadas, pero, en el min. 0’35 llega al punto de pronunciar la palabra “mínimos” que está diciendo Inés Arrimadas. Querría quitarle el atril y el micro a Inés para ponerse él. De esta forma, controlaría la situación, y considera que él lo haría mejor.

Se trata por tanto de una persona con innegables dotes de comunicación, pero también con algunos rasgos de carácter que hay que tener en cuenta a la hora de votar. Por supuesto, yo os doy la información desde el punto de vista no verbal. La decisión está en vuestras manos, y, claro está, no todo se centra en el candidato: hay que valorar también el programa y sus expectativas de cumplimiento.