¿Amas a un hombre de 50? Mal asunto.

El hombre de 50 no te deja entrar de gratis en su vida, te mira con distancia, como el avaro mercader que con su estrecho monóculo escruta tu ofrenda antes de dejarte pasar a su casa y ofrecerte alimento. La vida ha dejado en él un poso de escepticismo que le hace mirarte con una desconocida e íntima ironía, con desconfianza y cansancio.

Ves ese tipo que cruza la calle, altivo, con clase, seguro de sí mismo. Tiene 50 años. No te dejes engañar por su estupendo aspecto y el aire tibio que le acompaña, ese suave murmullo a equilibrio interior, el verbo manso que a tus noches envía como un parlante animal de compañía. Esa luz que lo envuelve en sus días no es la magia que tú le atribuyes sino la simple y azul rutina del cielo. Todo lo que sabes de él es también lo que ignoras. Todo cuanto has visto es todo cuanto va a mostrarte.

Si se te acerca, lo hará como un vegetal orienta su tallo hacia la luz, sin proponérselo, sin aplicarse en ello. No tiene más interés. Luego te alejará el cielo con las yemas de sus dedos y te arrojará a las entrañas de la oscuridad sin apenas esfuerzo. El hombre de 50 borra el camino que anda para que no puedas seguirlo. Si te lo encuentras en la barra de un bar, no te mirará, porque sencillamente, no te ve. Anda ensimismado en su complaciente soledad o envuelto en un debate conspiranoico con otro de 50. No les importa estar muertos para los demás, porque ya están vivos para sí mismos y no necesitan testigos de su felicidad. Es la soberanía de los 50 frente al mundo.

Pronto llegarán tus noches de fiebre llamándolo en sueños, pero cada palabra de amor que le dediques se deshará como hojaldre en su interior. Ve con una vendimia abundante fluyendo de tus manos, llénale los labios del cristal de azúcar y dibújale el aire de los frutos que no existen, que no lo apreciará. Ya lo tuvo todo una vez. Y tú has llegado tarde.

(Nota de consuelo para quien ama a un hombre de 50: según el psiquiatra Carlos Castilla en su obra 'Teoría de los sentimientos', a los 60 el hombre vuelve a amar como un adolescente)