La Policía Local de Benidorm ha intervenido varios perros cuyos propietarios tenían viviendo en condiciones deplorables en un terreno de la partida Armanello. La intervención, en la que también colaboró la Policía Nacional, se inició a requerimiento de miembros de la asociación animalista Somos Gos, con sede en Altea pero que trabaja en toda la comarca rescantando animales en situación de abandono o víctimas del maltrato.

Voluntarios de esta asociación han explicado que llevan mucho tiempo teniendo en conocimiento que en esta zona de Benidorm, una de las más degradadas y pendiente ahora del desarrollo del plan urbanístico Ensanche Levante, existían criaderos ilegales de perros. Al parecer, sus responsables, que no han sido identificados, utilizarían a perras para tener cachorros y venderlos, bien haciéndolos pasar por animales de raza bien a personas que utilizan estos animales para ejercer la mendicidad, tal y como ha explicado Mariola Terrez, portavoz de Somos Gos.

Ante esta situación, y tras verificar la existencia de al menos ocho canes en malas condiciones, la asociación de defensa de los animales se puso en contacto para denunciar los hechos ante la Policía Local, logrando que por primera vez agentes de este cuerpo y de la Nacional se desplazasen hasta el lugar este martes y llevasen a cabo una intervención para requisar tres de estos animales, que han sido llevados a las dependencias de la protectora de animales de Benidorm.

La situación con la que se encontraron animalistas y agentes puede observarse en el vídeo que acompaña esta información. Los animales tan sólo disponen de pequeñas jaulas, transportines o incluso un contenedor de basura volcado para poder refugiarse del sol durante el día o de las bajas temperaturas nocturnas. Permanecen atados las 24 horas del día, rodeados de suciedad, heces y sin apenas comida o agua limpia para alimentarse y beber. A ello se suma que los animales ni tienen chip ni ningún otro tipo de identificación, ni disponen de las vacunas en regla, por lo que, al margen de la incautación por parte de la Policía, no se ha podido interponer denuncia alguna al no haber podido identificar a sus propietarios.

Los miembros de Somos Gos descubieron también que uno de los ejemplares, de raza Husky, tenía dentro del contenedor de basura al que está atada hasta cinco cachorros recién nacidos, de los que los voluntarios se han hecho cargo y que van a reagrupar con su madre para que puedan salir adelante.

Fuentes del departamento de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Benidorm han explicado que la Policía Local constató que los animales se encontraban en situación de abandono, en malas condiciones de habitabilidad y sin ningún tipo de registro sanitario o identificación de sus dueños. Además, confirman que los agentes constataron que la finalidad de estos animales era destinarlos a la mendicidad, motivo por el cual procedieron a su intervención, con el fin de rescatarlos de esta penosa situación.