«Por desgracia Berlusconi es un símbolo de la política actual, un gañán, zafio y analfabeto funcional... en Benidorm triunfaría!!». Un tuit escrito en septiembre de 2009 por Ángel Garrido, el candidato del PP a suceder a Cristina Cifuentes al frente de la asamblea de Madrid, encendió ayer la polémica no sólo a nivel local, sino también en el ámbito nacional, por lo desafortunado del mismo. El presidente en funciones y aspirante a presidir la Asamblea de Madrid, cargando contra un destino que es elegido cada año por cientos de miles de madrileños para pasar sus vacaciones; donde muchos de ellos tienen, además, su segunda residencia y al que, no en vano, todo ello ha llevado a tildarlo durante muchísimos como «la playa de Madrid».

La polémica generada desde primera hora de la mañana por las palabras de mofa que Garrido habría empleado para comparar la ciudad con Berlusconi llevó horas después a un portavoz del mismo a aclarar el contenido del mensaje. Un mensaje que, según afirmó, se redactó dentro del contexto político de la moción de censura que en septiembre de 2009 despojó al Partido Popular de la Alcaldía de Benidorm. De hecho, el mismo día en el que fue escrito, el socialista Agustín Navarro junto al resto de concejales de su partido había presentado por registro la moción contra el entonces alcalde Manuel Pérez Fenoll, que once días después fue desalojado del sillón de alcalde con el voto de los doce ediles socialistas y el apoyo del concejal tránsfuga José Bañuls.

El portavoz de Garrido afirmó que sólo en un contexto como el antes mencionado, que también fue noticia de ámbito nacional, se explica aquel tuit en redes sociales, el cual aseguró no tenía ninguna intención de menoscabar ni de insultar ni a la ciudad de Benidorm ni a sus habitantes. De hecho, siempre según esta fuente, Ángel Garrido simplemente trató de hacer un paralelismo entre las formas de Berlusconi y la situación política que se vivía en Benidorm en aquellos momentos, pero sin ánimo en ningún momento de ofender a la ciudad. Igualmente, esta fuente indicó que el sucesor de Cifuentes llegó a veranear años atrás en Benidorm y que, incluso, es propietario de un piso en una localidad turística de Alicante, por lo que no tendría nada en contra de la provincia, sino todo lo contrario. Por último, estas mismas fuentes censuraron que desde la oposición se intentara sacar rédito de dicho tuit, «creando una polémica artificial» y transmitieron el «respeto» de Garrido hacia «una ciudad de la que ha disfrutado en reiteradas ocasiones, que es ejemplo de dinamismo, y que ha sabido convertirse en un referente turístico, gracias a la competitividad y saber hacer de sus habitantes».

La polémica en relación a éste y otros tuits de Garrido se produjo después de que las redes sociales «rescataran» ayer mensajes del archivo de Garrido de distinta índole. Sin embargo, el referente a Benidorm, del que se hizo eco este diario, fue el que más indignó en la ciudad turística por los calificativos que lo acompañan: «gañán», «zafio» y «analfabeto funcional».

Tras conocer el contenido del mismo, el portavoz del gobierno local, José Ramón González de Zárate (PP), consideró que las palabras de su compañero de filas podrían ser fruto de que «no conoce Benidorm ni ha estado nunca aquí». De ahí que, primeramente, invitara al presidente en funciones de Madrid a «visitar la ciudad en cuanto jure su cargo y podrá comprobar en primera persona por qué miles de madrileños eligen Benidorm para venir de vacaciones». Lo mismo trasladó la alcaldesa en funciones, la también popular Ana Pellicer: «A lo mejor en todos estos años ha cambiado de opinión», dijo la edil, quien junto a De Zárate se aventuró a afirmar que aquellas palabras, como después confirmaron personas vinculadas al propio Garrido, podrían haberse producido en el contexto de la moción de censura: «En aquellos días se hablaba de Benidorm vinculada al transfuguismo, el robo de votos y la mala imagen democrática que estaba dando el PSOE de nuestro pueblo».

El mismo mensaje fue lanzado por el senador y portavoz de Turismo del PP en el Senado, Agustín Almodóbar, quien igualmente invitó a Ángel Garrido a desplazarse a Benidorm próximamente y se prestó voluntario para enseñarle personalmente el municipio. «Seguro que entonces cambia de opinión», agregó Almodóbar.

Desde la oposición municipal no dudaron en lanzarse contra el sucesor de Cifuentes y exigirle una disculpa pública. El portavoz del PSOE, Rubén Martínez, afirmó que el tuit de Garrido «despreciaba no solo a Benidorm y sus vecinos, sino también a los miles de madrileños que pasan sus vacaciones aquí». La líder de Liberales, Gema Amor, confió en que «el señor Pérez -en relación al alcalde- no agache la cabeza ante su partido y le ponga en su sitio -a Garrido-». Por último, Josep Bigorra, de Compromís, lo consideró una falta de respeto.