Reconocida por sus diseños de vestuario y actualmente muy activa en televisión. ¿Qué proyectos tiene entre manos?
Estoy haciendo el vestuario para «Élite», una serie de la plataforma Neftlix. Está protagonizada por jóvenes actores y a finales de mayo finalizará la grabación. También trabajaré en una película por la zona de la Comunidad Valenciana. Esto me va a permitir volver a mi tierra y estar cerca del mar. Estoy contenta, van saliendo trabajos.
Ha trabajado para directores como Raúl Arévalo o Javier Ruiz Caldera y actores como Raúl ArévaloInma Cuesta
No se puede decir a qué hijo quieres más. Cada vez que finalizas una película piensas que has hecho un buen proyecto. Tengo directores que suelen elegirme, como Ruiz Caldera, María Ripoll o Roberto Santiago. Son más amigos que realmente jefes. Se trabaja con mucha presión en el cine y siempre que se ve una película terminada da pena, pero también satisfacción. Intervienen muchos factores para que una película llegue a ser una obra maestra, pues participan guionistas, maquilladores...Por eso no me gusta que critiquen proyectos en los que he participado. La gente del mundo del cine se deja la piel en cada obra.
¿Cómo es el proceso de crear el vestuario para una película?
En todas las películas empiezas leyendo el guión, reuniéndote con el director y con el director de fotografía y comienzas a hacer un dossier. No siempre el género dicta el vestuario. A veces, haces una comedia y el look puede ser más serio. Un thriller, por ejemplo, puede tener colores alejados del gris. Ahora está en cartel «El Aviso», de Daniel Calparsoro, para la que hemos usado tonos rojos, mostaza o burdeos. Cada película tiene un lenguaje propio que vas creando con el resto de compañeros. Una película es como un equipo de fútbol, en el que cada posición debe funcionar para ganar el partido.
Benidormense y defensora de la ciudad (la hemos visto en televisión con camisetas del municipio). ¿Cuál es su relación con Benidorm?
He nacido allí y mi familia y amigos están allí. El alcalde es amigo mío desde pequeña y soy quien soy por haber nacido en Benidorm.Creo que tengo algo diferente del resto de figurinistas por venir de esta ciudad. Mi diferencia es que no tengo prejuicios estéticos al nacer en un sitio con una estética tan vanguardista, moderna y distinta.
Benidorm es una ciudad de contrastes. ¿Inspira a la hora de crear diseños?
Nacer en Benidorm, una ciudad con una estética muy diferente a otras en España, ha hecho que tenga una visión más abierta del mundo. Esto se plasma en la ropa y en mi manera de contar historias con ella. No le tengo miedo a casi nada. Ni al desnudo, ni al barroquismo o a la elegancia...He crecido allí y es mi cultura. Espero retirarme en Benidorm. Allí están mis raíces y si hubiera nacido en otro lugar no sería la misma.
Se codea con rostros muy conocidos de la televisión y el cine. ¿Qué les transmite de su ciudad?
Todos los que me conocen saben que soy benidormense. En el cine, cada uno tiene una característica. En este sector soy conocida como Cristina «la brillos», pero también me identifica mucho venir de esta ciudad.
Más de 20 años diseñando para directores y algunos han reconocido ahora su trabajo, tras aparecer en programas como «Cámbiame». ¿Le ha costado ser profeta en su tierra?
Como figurinista sí soy conocida en el sector. Es normal que la gente, en el cine, conozca a los directores o los actores y no se fije en los técnicos. Me gusta que me reconozcan por mi trabajo, pero ahora parece que, tras salir en televisión, el gran público se fija más e identifica tus vestuarios en películas y series. Me da mucho pudor que, al trabajar con actores o directores, me saluden primero a mí y no a ellos. Al que hay que saludar, muchas veces, es al verdadero protagonista de un rodaje.
¿Volverá pronto a Benidorm?
Iré a finales de abril a presentar un proyecto. Espero ver allí a mucha gente conocida.
