El Ayuntamiento de Benidorm por fin ha puesto en marcha, en una primera fase de pruebas, el sistema digital con el que por primera vez la administración local benidormense controlará la llegada y salida de los más de 700 trabajadores públicos de la ciudad turística. Se trata de una medida de lo más esperada y que se ha aplazado en diferentes ocasiones a lo largo de este año por cuestiones burocráticas. La redacción de una normativa para regular el sistema, las alegaciones presentadas al citado documento o los diferentes periodos en los que el reglamento ha sido sometido a exposición pública han obligado a postergar el inicio de esta nueva herramienta hasta hace apenas unos días.

Así las cosas, no fue hasta hace escasos cinco jornadas hábiles cuando los casi 800 trabajadores del Ayuntamiento de Benidorm se encontraron con que debían fichar con su huella digital tanto a la llegada como a la salida de su puesto de trabajo. Como se recordará, el Consistorio habilitó un total de 24 dispositivos de lectura de huellas dactilares, que se encuentran en los puntos de control, distribuidos en las distintas dependencias municipales. Cabe destacar que, en esta primera etapa de pruebas, los funcionarios no se enfrentan a sanciones en caso de registrar retrasos en la llegada o abandonar antes de hora su puesto. Una vez concluida la fase experimental del sistema este tipo de comportamientos sí podrán ser objeto de sanción.

De hecho, los funcionarios de Recursos Humanos deberán controlarán de manera exhaustiva que sus compañeros cumplan con la jornada laboral. A excepción de empleados concretos, como la Policía Local que tiene distintos turnos, el horario con carácter general se iniciará a las 7.45 horas y finalizará a las 15.15. No obstante, para facilitar la conciliación de la vida laboral, familiar y personal, se contempla una flexibilidad horaria al inicio y fin de la jornada -de 7.30 a 9 y de 15 a 16.30 horas- siempre que se cumplan unos requisitos.