Y al final el tiempo se echó encima. Ni las prisas del gobierno local por acabar las obras iniciadas en el centro de la ciudad turística ni los esfuerzos de los operarios lograron que los trabajos de la calle Herrerías estuvieran ayer concluidos antes de que tuvieran lugar los primeros pasacalles de las Fiestas Mayores Patronales de este año.

La estampa ayer por la tarde era de lo más inusual. Mientras las reinas de las Fiestas bajaban hasta la calle Martínez Alejos para proceder a inaugurar el alumbrado festero con su correspondiente banda, el sonido de las máquinas seguía como telón de fondo. No obstante, a última hora de la noche los operarios ya habían logrado concluir los trabajos de la calle Herrerías mientras que en Almendros siguen activos.