El día ha llegado. Los peñistas llevaban todo el año esperando al segundo viernes de noviembre para volver a enfundarse sus camisetas y blusones y poder bajar la calle Ruzafa y Martínez Alejos al son de la música. Y lo hicieron ayer a todo ritmo en uno de los actos más esperados de las Fiestas Mayores Patronales de Benidorm: la Entrada de Peñas.
Aunque los días grandes dedicados a la patrona, la Verge del Sofratge, comienzan hoy oficialmente a las 12.00 horas, el día de antes los peñistas ya demostraron sus ganas de pasarlo bien y disfrutar en los cinco días que les quedan por delante. A la hora prevista, las cerca de 200 agrupaciones festeras fueron acudiendo a la parte alta de Ruzafa donde se daba inicio al tradicional desfile. Una a una, las peñas fueron ocupando su lugar por orden de antigüedad, desde la que más años lleva en la fiesta a la que menos. La peña La Soca fue la primera en salir detrás de las Reinas y damas de este año.
La música acompañaba el recorrido por la calle Ruzafa y Martínez Alejos que se encontraban llenos de vecinos y turistas que no quisieron perderse este vistoso acto que marca el inicio del programa de fiestas cada año.
Pelucas, tutús, coletas estrambóticas, indios, futbolistas, militares o gallinas alegraban a cada peña que lucía su estandarte a la cabeza. Los disfraces cobraron un año más todo el protagonismo, algunos de ellos para toda la peña, como algunos que iban de superhéroes, Harry Potter, de raperos o militares. Otros llevaban algún detalle en el pelo o colgado, algunos de ellos con elementos que recordaban a cada peña.
Banderines y detalles
A su llegada a la tribuna ubicada en el cruce con la calle Gambo les esperaba un miembro de l'Associació de Penyes Verge del Sofratge dando el nombre de cada una de las agrupaciones. Tras la foto oficial de cada año, otro miembro de la entidad les entregaba mochilas y pins; desde la tribuna, los representantes municipales y festeros, colocaron en sus estandartes los corbatines conmemorativos por su participación en las Fiestas Mayores Patronales de 2017 y entregaron a cada peña un obsequio que este año fue una pulsera blanca de manos de la Concejalía de Fiestas.
Durante más de dos horas, los peñistas desfilaron por estas calles principales del centro ante la atenta mirada del numeroso público congregado.
Una vez terminada la Entrada de Peñas se dio paso a la fiesta en los locales festeros. Los participantes fueron acudiendo a sus sedes o a las de otros para poder comenzar la primera noche de juerga a la que seguirán otras muchas. La calle La Palma, un año más, se convirtió en la reina del barrio del Calvari, donde se ubican la mayoría de peñas. Esta pequeña vía se llenó de gente en pocos minutos y de música en todos los locales. Pero también lo hicieron otras más alejadas del bullicio para disfrutar del primer día festero. Bandetas o fiestas ya marcaron el inicio de los días festivos.
Este año, como el pasado, los benidormenses pudieron disfrutar de la música en los locales hasta las 4.00 horas, una hora más, hasta las 5.00 horas, ya dentro de cada uno de ellos y a un volumen mucho más bajo. Así lo marca el bando de Fiestas desde el pasado año. Hasta las 10.00 horas no podrá volver a haber ruido para garantizar el descanso de los vecinos y, también, de algún peñista que alargó la noche.
