Los peñistas ya calientan motores para las Fiestas Mayores Patronales de Benidorm que se celebran en apenas dos semanas. El parque de l'Aigüera se convirtió ayer en el epicentro de la actividad en el Dia de Les Penyes donde se llevaron a cabo actividades para los mayores y más pequeños además de picaeta para los festeros.
La jornada comenzó bien temprano con el desayuno con chocolate en la Casa del Fester para los más madrugadores. De ahí, los asistentes se dirigieron en pasacalle acompañados de la bandeta «La Nova» hasta la Iglesia San Jaime y Santa Ana donde se celebró la tradicional misa que recuerda a los peñistas difuntos.
Mientras, sobre las 9.30 horas, la peña La Foscor esperaba ansiosa la llegada de los participantes para inscribirse en la gymkana. Ellos fueron los vencedores del pasado ejercicio, por tanto, los encargados de organizar la de este año.
En esta gymkana participaron 24 peñas que durante más de dos horas tuvieron que superar diferentes pruebas repartidas por el barrio del Calvari, el parque de l'Aigüera y el Castillo. Una de ellas consistía en contestar preguntas sobre Benidorm, otra sobre la peña organizadora y las demás se basaban en ejercicios psicotécnicos de lógica o matemáticas. Al cierre de esta edición, no se había dado a conocer el ganador que cogerá el testigo el año que viene.
Además, desde la campaña «Coneixement» también se llevaron a cabo pruebas que pretendían concienciar a los participantes sobre el consumo de alcohol. Para ello, utilizaron unas gafas con las que los festeros comprobaron las consecuencias de ir en estado de embriaguez.
La jornada contó además con hinchables para los más pequeños en el Auditorio Julio Iglesias así como una picaeta para todos los peñistas. Ya por la tarde, la merienda infantil precedió a los esperados «playbacks» que arrancaron con los más pequeños.
Medidas de seguridad
Durante la jornada, el refuerzo policial extremó las medidas de seguridad, sobre todo, por la tarde a la entrada de los festeros a l'Aigüera. Policías y guardias de seguridad controlaron el acceso al que se prohibió la entrada con cualquier envase. Además, adultos y menores iban identificados con pulseras para evitar la venta de alcohol a los más pequeños. Al cierre de esta edición no se había producido ningún incidente.
