El gobierno de Benidorm celebró ayer una Junta de Portavoces para abordar todos los detalles relativos a las gestiones que hasta ahora ha realizado con la Generalitat en el proceso para contar con un nuevo centro de salud en el distrito del Rincón de Loix. Así las cosas, el propio alcalde Toni Pérez explicó ayer, a preguntas de este diario, que fue en mayo cuando el ejecutivo autonómico contactó «por última vez» con el Consistorio para solicitar documentación relativa a este tema. «La documentación fue trasladada en junio y entendemos que están trabajando», zanjó el primer edil benidormense en un intento por enterrar la polémica que en las últimas semanas ha suscitado el retraso de este ansiado ambulatorio.

Tanto es así que en las comisiones informativas del pasado lunes los grupos de la oposición solicitaron al gobierno el expediente completo para saber qué estaba pasando con la cesión de la parcela donde debe ubicarse este centro de salud. No hay que olvidar que desde el Consell dicen que es el Ayuntamiento el que no había completado el proceso de cesión. «El proceso de cesión está en marcha», matizó ayer el alcalde, quien recordó que «se trata de un asunto de ciudad y debemos estar todos a una».

En cambio, a la Junta de Portavoces convocada ayer no asistió el edil de Compromís, Josep Bigorra, como señal de protesta ante el PP. En concreto, el concejal nacionalista había solicitado la entrega de la documentación del expediente de forma previa a la celebración de la junta. Algo que no se produjo. Por ello, el regidor no asistió. «Ya se lo hemos advertido en mucas ocasiones al gobierno», recordó Bigorra.