El equipo de gobierno popular de Finestrat aprobó ayer en solitario, durante el pleno ordinario del mes, una modificación de su Plan General para permitir la construcción de más unidades inmobiliarias en el sector de Sierra Cortina. En concreto, la medida autoriza a los promotores de las parcelas pendientes de desarrollo a levantar chalets adosados en el mismo espacio que hasta ahora se reservaba para una casa unifamiliar, como explicó ayer a este diario el alcalde del PP, Juan Francisco Pérez Llorca.
Con esta modificación se busca dar un impulso al desarrollo urbanístico de los sectores 1 y 2 de Sierra Cortina, que todavía cuentan con una serie de parcelas sin construir, como recalcó ayer el primer edil de Finestrat a preguntas de este diario. «Son zonas fantasmas que, al final, generan problemas de robos», explicó el alcalde popular a la vez que señaló que la demanda ha cambiado desde que se planificaron estos sectores y, de ahí, el cambio urbanístico. La intención, por tanto, es que los promotores se animen a levantar casas en la zona.
No aumenta la edificabilidad
Hay que tener en cuenta que, según indicaron fuentes municipales, sólo los promotores del suelo que tengan en sus manos 2.000 metros de terreno podrán desarrollar chalets adosados. Y, además, tendrán que levantar al menos cuatro viviendas unifamiliares para, de alguna forma, continuar con la estética urbanística implantada en la zona. Asimismo, el propio alcalde señaló que las unidades pareadas ocuparán el mismo terreno que estaba reservado a las unidades unifamiliares, por lo que no habrá un aumento de edificabilidad. «En esos sectores no hay límites de unidades inmobiliarias», apuntó el primer edil de Finestrat.
Una serie de cambios urbanísticos que Pérez Llorca defiende en pro del interés general. «Ahora mismo hay zonas en estos sectores totalmente abandonados y que se han convertido en un foco de peligrosidad», aseguró el alcalde popular.
Sin embargo, desde el grupo socialista creen que estos cambios están motivados por otras cuestiones. «Se han quitado la careta y se han plegado a los intereses del promotor de estos sectores, tomando una decisión arbitraria y que nada tiene que ver con los intereses generales del municipio», lanzó ayer el portavoz del PSOE, José Alfonso Llorca, quien a su vez quiso justificar su voto en contra a la propuesta.
«Huele muy mal»
«Desde las filas socialistas queremos manifestar que hemos votado en contra ya que algo en todo este proceso huele muy mal. Y es que, no tiene sentido que se modifique ahora un sector que está al 70% urbanizado para que se prime con más edificabilidad, a no ser que el PP de Finestrat tenga mucho interés en primar los intereses de algún propietario en particular que tenga en ese sector parcelas pendiente de construir, por lo que mucho nos tememos que entre los propietarios de estas parcelas se encuentra gente muy próxima al PP y al alcalde de Finestrat», aseguraron en un comunicado a la vez que acusaron de «trato de favor» a estos propietarios frente al 70% de los dueños que ya han edificado sus parcelas.
