La polémica por la celebración de conciertos en la Parroquia Nuestra Señora de la Asunción de La Vila suma un nuevo capítulo. Los responsables del templo y el Ateneu d'Historia d'Art siguen su «batalla» de argumentos para defender su postura ante la prohibición de realizar el tercer Festival de Música Antigua «La Vila del Joy» en la iglesia situada en pleno casco antiguo.
Como ya publicó este diario, la entidad cultural lanzaba hace más de un mes una campaña en «change.org» para recoger firmas después de recibir la negativa para celebrar ese evento musical, que va por la tercera edición. Las dos anteriores sí se celebraron en el templo. Así apuntaban en su petición que la Iglesia de la Asunción pudiera «ser utilizada para actos culturales» ya que es un BIC (Bien de Interés Cultural).
Ante esa campaña por internet, los «sacerdotes responsables de la Parroquia Arciprestal» indican que «nos sentimos en la obligación de hacer algunas aclaraciones». En un comunicado de dos páginas esgrimen sus razones para esta prohibición.
Para empezar indican que la Vicaría General de la Diócesis Orihuela-Alicante «emitió una carta con las disposiciones que regulan los conciertos en las iglesias». Entre ellas destacan que «las iglesias son lugares sagrados destinados al culto» y «no pueden ser simplemente considerados como lugares públicos destinados a cualquier tipo de reuniones». Además, que en los templos «sólo se celebrarán conciertos en los casos excepcionales» y que éstos deben ser «únicamente de música sacra o religiosa» y apunta que «no toda la música clásica puede considerarse» de este tipo.
Los párrocos indican que el festival «que ha movido esta polémica» en La Vila «no cumple estos requisitos por lo que no se ha concedido dicha autorización». Los sacerdotes apuntan que «no se han prohibido los conciertos en general» en la parroquia.
El comunicado continúa esgrimiendo razones que contradicen a lo dicho por la entidad cultural. En concreto explican que, a pesar de que la iglesia es BIC desde 2003, y «tiene derecho a solicitar y recibir subvenciones públicas», no deja de ser un «edificio privado» propiedad de la Iglesia.
Además hablan de que no es cierto que se «de la espalda a la cultura», que «no es verdad que se hayan recibido subvenciones públicas para su mantenimiento» y que tampoco lo es que «los conciertos de otros años se llevaran a cabo para recaudar fondos» para restaurar el templo.
La Carta Pobla
En cuanto a uno de los temas más controvertidos, el de no celebrar la «Carta de Poblament» en 2018, puntualizan: «ya hace al menos dos años» que se advirtió a la asociación ya que «la iglesia no es el mejor sitio (...) y no fue el lugar donde se otorgó» este título.
Ante todo lo explicado, los organizadores han dado sus respuestas en la página donde siguen recogiendo firmas que ya llegan casi a las 700. Allí contestaron a las dos primeras cuestiones apuntando que «no opinaremos sobre las normas de funcionamiento» de la iglesia pero siguen apuntando que se trata de un BIC.
Así, respecto a que «no se cumplen con los requisitos» en cuanto a la música, responden que se trata de la edición con más música sacra de las tres celebradas. Por ahora, sólo han contestado a estas dos cuestiones y alegan que seguirán haciéndolo en días posteriores. Así que hay polémica para rato entre ambas entidades.
