El colegio Leonor Canalejas de Benidorm abrirá el 1 de julio de nuevo sus instalaciones para prestar un servicio de comedor social para los niños con dificultades económicas. Como ya ocurrió el año pasado, será una empresa privada, la mercantil Carrillo e Hijos, la que costee la alimentación de estos niños durante los dos meses de verano. El pasado año los voluntarios de Cáritas también hicieron turnos para atender a los 21 niños que acudieron. Para este años, aún no ha trascendido los menores que se beneficiarán puesto que sigue abierto el plazo.