Los progresos en el camino iniciado por una promotora para levantar un rascacielos en la primera línea de la zona de La Cala de Benidorm han despertado el rechazo de los vecinos de la zona, que se oponen al proyecto y ya han anunciado una serie de acciones contra el mismo. No hay que olvidar que la firma Goya Real Estate, que está detrás de esta gran torre de apartamentos de uso residencial que será la primera que se construye frente al mar en esta parte de la ciudad turística, ya ha solicitado licencia de obra al Ayuntamiento después de haber culminado un último trámite urbanístico pendiente para poder dar el último paso previo a los trabajos.
Así, la mercantil necesitaba que el Ayuntamiento diera luz verde a la segregación de la parcela donde se levantará este rascacielos de 22 alturas, un solar que formaba parte de los terrenos del mítico hotel Delfín y que desde hace unos días ya han sido desvinculados del mismo. Por ello, es ahora cuando la firma ha solicitado el permiso de obra tras anunciar su intención de iniciar los trabajos el próximo mes de noviembre, una vez concluida la temporada alta. Una noticia que ha sentado como un jarro de agua fría a los vecinos de la zona, que no ven con buenos ojos este proyecto que tendrá 22 alturas y 44 unidades inmobiliarias.
Tras ser conocedores de que los trámites para levantar esta torre van a buen ritmo y ante la inminente construcción de la torre, los vecinos han decidido dar un paso al frente para bloquear el proyecto. Así las cosas, cuatro comunidades de propietarios de la zona presentaron ayer un escrito ante el Consistorio para solicitar información sobre el proyecto y dejando claro su intención de presentar alegaciones al mismo.
Negativa
Los vecinos justifican su negativa al proyecto al entender que afecta al interés general de la ciudad turística ya que «sienta un precedente» para que se levanten más torres de apartamentos en esta zona. «Hasta ahora La Cala se había librado de este tipo de construcciones tan abundantes en otras zonas como en la playa de Levante», recordaron los propietarios a la vez que admitieron que el edificio, que se denominará «Delfin Tower», les quitará vistas al mar y hará perder valor a sus inmuebles.
Además, los propietarios consideran que esta torre, que tendrá forma de vela como ya adelantó este diario, «romperá con la estética de esta zona de la ciudad» donde hasta ahora han imperado las plantas bajas, al menos, en la primera línea. Asimismo, mostraron su enfado ante el hecho de que la administración local no les haya informado previamente del proyecto y se hayan tenido que enterar por los medios de comunicación del mismo.
Por todo ello, los propietarios afectados han anunciado ya una serie de medidas para paralizar el proyecto que todavía está a expensas de que el Ayuntamiento de Benidorm le conceda la licencia de obra.
