El turismo, siempre el turismo. Miguel Pérez Devesa lo tenía claro, era el futuro para el desarrollo de la ciudad y así lo manifestó en una de sus primeras entrevista a INFORMACIÓN tras su llegada a la Alcaldía de Benidorm en el año 1974. «Mi objetivo es hacer de Benidorm el mejor centro turístico de España y de Europa». Este era su anhelo y debió atravesar una de las etapas más duras para la industria, con el colapso de los turoperadores. En aquella entrevista señalaba que: «Si Benidorm ha sido y es una ciudad experimental, ahora debemos hacer que todos tomen ejemplo de nosotros para ratificar ese experimento». En este diálogo también subrayaba la importancia de la desestacionalización de la oferta turística: «A pesar de que Benidorm tiene cualidades inmejorables como ciudad turística de veraneo, creo que es mucho más que una ciudad turística de invierno. Hay que hacer lo posible para que el turismo se sienta a gusto durante esa época».