La semana del viaje oficial de una delegación de Benidorm a Manizales (Colombia) finalizó con el acto que más interesaba a las autoridades locales: la inauguración del centro de congresos y el parking del Hotel Benidorm, dos obras con las que el empresario José María Caballé (presidente de Servigroup) da por concluido un «sueño» que arrancó en 2012 con la apertura de un establecimiento de 64 habitaciones en la capital del departamento de Caldas.

Al acto acudieron las máximas representaciones de la ciudad y el departamento, desde el alcalde hasta el gobernador, pasando por el presidente del Consejo, los responsables de la Policía Metropolitana y un amplio plantel de representantes del empresariado local y colectivos cívicos. Hasta la Iglesia envió una delegación de monjas y al sacerdote Christian Echeverri para bendecir las instalaciones.

La vinculación de Caballé con Colombia es intensa. De hecho, dispone ya de la «cédula de extranjería», documento previo a la solicitud de ciudadanía. Hace tiempo, este empresario de Benidorm tuvo otros negocios en el país, pero se deshizo de ellos para dedicarse por entero a lo que mejor sabe: hacer hoteles. En 2010 recaló por primera vez en Manizales por cuestiones personales y como turista. Unos meses después volvió y comenzó la búsqueda de terrenos. En 2012 inauguró el hotel.

«Me sorprendió el entorno de naturaleza de esta ciudad (a los pies del Nevado de Ruiz), de verdes valles y frondosas colinas y la imagen de mi primer amanecer en esta ciudad quedó grabada en mi mente definitivamente». El propio Caballé relató su «enamoramiento» de Manizales a los invitados al evento, y el proceso que siguió para construir su hotel número 18, con el que alcanza la cifra de 10.000 camas hoteleras de gestión directa y los 2.000 empleados, treinta de ellos en Colombia. «Hoy inauguramos un aparcamiento para 50 vehículos y un salón de congresos con capacidad para 300 personas, con lo que acabo de dar forma a mi sueño», siguió relatando. «Las cosas han cambiado mucho desde 2010. Ya no soy el turista curioso que apareció entonces en Manizales. Actualmente me siento un colombiano más. Ustedes me aportan mucho, y yo correspondo como mejor puedo».